Bilbao - El relato, o los relatos como se puntualiza desde diversos sectores, se ha convertido en uno de los ejes básicos en el proceso de paz y convivencia en Euskadi. Cuál es el relato y quién hace ese relato es una de las controversias que enmarañan este proceso. Ahora, sin embargo, las víctimas tendrán la opción de dejar grabado en vídeo su propio testimonio de lo vivido en primera persona, un material que quedará depositado en el Instituto de la Memoria con el fin de que "sean sujetos activos de la memoria con voz propia". Con ello se pretende que las víctimas se sientan partícipes del proceso de construcción de la convivencia y se creen espacios de cooperación en la construcción de la memoria.

Este es uno de los principales aspectos recogidos en el programa Gertu, presentado ayer en Bilbao por el secretario general de Paz y Convivencia, Jonan Fernández, y la directora de Atención a las Víctimas, Monika Hernando, con el que el Gobierno Vasco reforzará su compromiso con las víctimas a través de un "diálogo directo y personalizado". Gracias a esta iniciativa, los responsables del área de paz y convivencia del Ejecutivo de Iñigo Urkullu mantendrán en un primer momento un contacto directo con alrededor de 300 familiares de personas asesinadas por organizaciones terroristas que residen en Euskadi.

Según explicó Jonan Fernández, el Gobierno Vasco ha tomado en consideración los resultados del estudio que se realizó el pasado año por parte del Instituto Vasco de Criminología (IVAC) con víctimas indirectas de asesinatos residentes en Euskadi, un informe que detectaba carencias en la atención a las necesidades básicas de estas personas y ponía de relieve el interés de muchas de ellas en tener una participación más directa en los procesos sociales de construcción de la memoria, a través de sus propios testimonios.

Trato más personal La Secretaría de Paz y Convivencia tomó en cuenta estas reivindicaciones de las víctimas recogidas en el estudio de IVAC, lo que ha derivado en el programa Gertu, anunciado hace mes y medio por el lehendakari Urkullu y Josu Erkoreka , con el que se pretende "reforzar el trato humano personal" puesto que, tal como señaló Jonan Fernández "en la distancia corta se puede dar un diálogo afectivo y efectivo".

De este modo, desde ahora y hasta final de año, Aintzane Ezenarro y Enrique Ullibarriarana, asesores del área de víctimas del terrorismo de la Secretaría de Paz, y en colaboración con los miembros de IVAC serán las personas que se pondrán en contacto telefónicamente con las familias de las víctimas y les ofrecerán la posibilidad de mantener encuentros personales en los que en ocasiones también tomará parte la directora de Atención a las Víctimas.

Monika Hernando desveló que a las víctimas ya se les ha enviado por carta el programa Gertu y se les ha comunicado que se pondrán en contacto con ellas. "Vamos a escuchar, en primera persona, todo lo que nos quieran decir, y vamos a tratar de identificar sus necesidades básicas, sus inquietudes, o cualquier otra cosa que ellos nos quieran trasladar", aseguró. De esta forma, subrayó que se establecerán "prioridades de trabajo que traten de dar respuesta a estas necesidades". Asimismo, la directora de Víctimas resaltó el hecho de que en las cuatro últimas legislaturas se ha hecho un gran trabajo de apoyo y reconocimiento a las víctimas, una labor que se pretende reforzar ahora con el programa Gertu y "reforzar si cabe" la cercanía que siempre se ha mantenido con las víctimas.

Ampliarlo Jonan Fernández quiso dejar claro que en este acercamiento directo a las víctimas se huirá de todo paternalismo, algo que en su opinión supone un obstáculo. Por contra, se promoverá "la colaboración, la responsabilidad compartida y el empoderamiento vital de las víctimas". A su entender, lo que permitirá esta iniciativa que ahora se pone en marcha es favorecer la relación entre las víctimas y las instituciones, lo que ofrecerá a éstas la posibilidad de responder en todo lo que sea posible a las necesidades no satisfechas de atención básica a los familiares directos de las víctimas.

Aunque en un principio esta iniciativa se llevará a cabo con los familiares directos de las personas asesinadas que residan en Euskadi, Jonan Fernández manifestó que a tenor de los resultados que ofrezca este programa no se descarta ampliar el abanico y dar entrada a víctimas que quedaron heridas en acciones violentas o víctimas de abusos policiales.

Asimismo, Jonan Fernández recordó que el Gobierno Vasco tiene en marcha la elaboración de un informe sobre la situación de los atentados que aún no están esclarecidos, además de otros ámbitos de actuación para dar respuesta a las demandas que se detecten en materia de paz y convivencia.

Ámbito de actuación. En un principio la Secretaría de Paz y Convivencia se ha puesto en contacto con los familiares de las personas asesinadas en acciones terroristas que residen en Euskadi. Posteriormente, y a tenor de los resultados que se obtengan, se podrá ampliar a otras víctimas, especialmente a aquellas que resultaron heridas en atentados o las derivadas de actuaciones policiales.

Alrededor de 300. Monika Hernando aseguró que calculan que serán alrededor de 300 las personas con las que se pondrán en contacto, pero esta cifra se puede ampliar.

Jonan Fernández dejo claro que con el programa Gertu se pretende tener una relación más directa con las víctimas. Una atención personal en la que el eje fundamental será escuchar sus demandas y atender a las necesidades básicas