Las explicaciones del embajador de EEUU sobre el espionaje convencen a Margallo

costos asegura que los servicios secretos de su país han respetado la ley

El Ministerio de Exteriores español considera cerrado el incidente diplomático

Madrid. Estados Unidos ha ofrecido finalmente las explicaciones que la diplomacia española llevaba pidiendo desde julio ante las sospechas de que la Agencia de Seguridad Nacional (NSA) norteamericana hubiese espiado a ciudadanos y políticos españoles. El embajador de EEUU en España, James Costos, se reunió ayer por la mañana con el ministro de Asuntos Exteriores y de Cooperación, José Manuel García-Margallo, para responder a las inquietudes planteadas por el Ejecutivo español, que convocó el pasado 28 de octubre a Costos para pedirle explicaciones.

En ese encuentro, Costos aseguró que los servicios secretos norteamericanos que operan en nuestro país respetan "la privacidad de los ciudadanos españoles y el debido marco legal", según informó el Ministerio de Asuntos Exteriores y de Cooperación en un comunicado.

Preocupación legítima Costos considera "legítimas" las preocupaciones de los ciudadanos españoles y del Gobierno "en relación con las informaciones publicadas en medios de comunicación sobre las escuchas de Estados Unidos en España" y lamentó las "tensiones que esto ha podido causar en la relación bilateral", añade la misma nota. El embajador informó a García-Margallo de que el presidente Barack Obama ha impartido instrucciones para realizar una revisión detallada de las actuaciones de las agencias de inteligencia.

Y aseguró que las actuaciones de la inteligencia americana en España vienen motivadas por razones de "seguridad y lucha contra el terrorismo" y se realizan en colaboración con el CNI. "Se respeta por tanto la privacidad de los ciudadanos españoles y el debido marco legal", añade la nota de Exteriores, que añade que "en ningún caso estas actuaciones tienen unos objetivos comerciales".

El embajador también adelantó al ministro que Obama ha ordenado desclasificar numerosos documentos de la NSA y revisar "en profundidad" las capacidades de las agencias y su uso en países aliados y amigos. Desde el inicio de este asunto, los servicios de inteligencia de ambos países han venido manteniendo contactos para esclarecer los detalles de lo ocurrido. El embajador Costos y García-Margallo han acordado que "ésta sea la vía para resolver las cuestiones que queden abiertas". En la reunión, se ha acordado que el interés de ambos Gobiernos es "garantizar la seguridad y la lucha contra el terrorismo, así como el respeto a la privacidad de los ciudadanos y el respeto a la legalidad". "Las decisiones que está emprendiendo el presidente Obama, las relaciones entre nuestros servicios de inteligencia y las medidas que a nivel europeo podamos realizar contribuyen a este objetivo y afianzan la confianza que debe existir entre socios y aliados".

para el ministro, punto final El departamento que dirige García-Margallo cierra de esta forma este complicado capítulo, cuyos flecos que queden pendientes deberán ser abordados entre los respectivos servicios secretos. García-Margallo esperaba desde entonces aclaraciones "lo más completas posibles" sobre el espionaje, al tiempo que el Gobierno se remitía a lo que el director general del CNI, Félix Sanz Roldán, dijera esta semana en el Congreso.

Sanz Roldán defendió la legalidad de todas las actuaciones en territorio español del centro que dirige y aseguró que la colaboración con la NSA estadounidense se ha limitado a proporcionar información sobre los asuntos sobre los que hay acuerdo entre ambas agencias de inteligencia: terrorismo, crimen organizado, ciberespionaje e inmigración ilegal. Descartó que se hubiera espiado a políticos españoles.

James Costos, embajador de EEUU, a su llegada a la sede del Ministerio de Asuntos Exteriores. Foto: efe

Los datos

l El asunto llega a la ONU. La tercera comisión de la Asamblea General de la ONU comenzó ayer a estudiar una propuesta de resolución impulsada por Alemania y Brasil que busca poner fin al espionaje a gran escala y el respeto al derecho a intimidad individual.

l Snowden empezó a trabajar. El excontratista de la Agencia de Seguridad Nacional (NSA) de Estados Unidos Edward Snowden ha comenzado a trabajar en una gran empresa rusa. Su abogado, Anatoli Kucherena, se limitó ayer a apuntar que "todo va bien", sin revelar del nombre de la empresa. Snowden permanece prófugo de Estados Unidos y actualmente reside en Rusia en un lugar no revelado gracias al asilo concedido en agosto por las autoridades rusas.

l Obama y sus preguntas. El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, dijo ayer durante una entrevista con la cadena NBC que no indaga o explora el origen cuando se le presenta información de inteligencia sobre países o gobiernos aliados. Pero "si estamos hablando de Al Qaeda de otros países que representan una amenaza para Estados Unidos, entonces no solo estoy interesado en la información, sino también en cómo la hemos obtenido, porque eso es muy relevante", puntualizó el mandatario.