Oviedo. El parlamento asturiano se constituyó ayer con 44 diputados en vez de 45. El motivo fue la decisión adoptada por el Tribunal Superior de Justicia de Asturias (TSJA) de estimar el recurso interpuesto por Foro Asturias y ordenar repetir las elecciones del voto emigrante correspondiente a la circunscripción occidental (2.863 electores) en un plazo de tres meses. El TSJA aprecia que 332 votos de los que fueron computados no cumplieron los requisitos legales ya que dichos sufragios fueron dirigidos a la Junta Electoral Provincial de Asturias en lugar de hacerlo por medio del correspondiente Consulado, tal como establece la ley. "En la emisión de los votos discutidos dirigidos directamente a la Junta Electoral sin pasar por la misión diplomática, el elector se aparta por razones únicamente imputables a él de las reglas de la legislación meridianamente claras", aprecia el tribunal asturiano.

Esta situación implica que hasta conocer el nuevo resultado el PSOE perderá un escaño y se situará con dieciséis parlamentarios, por los doce de Foro Asturias, diez del PP, cinco de IU y uno de UPyD. Los portavoces de estos cinco partidos alcanzaron ayer un acuerdo para la formación de la Mesa de la Cámara, que ha dado la presidencia al candidato socialista, Pedro Sanjurjo. La vicepresidencia recae en manos de Pelayo Roces, de Foro Asturias. El popular José Agustín Cuervas Mons ostentará la vicepresidencia segunda y Aurelio Martín e Ignacio Prendes, del PSOE y de UPyD, respectivamente, formarán parte de la secretaría primera y segunda del Parlamento asturiano.

Este diputado había permitido a los socialistas e Izquierda Unida sumar 22 votos, empatando así con el partido liderado por Álvarez Cascos y el Partido Popular en un parlamento en el que UPyD tendría la llave de la gobernabilidad de la región. Si finalmente ese escaño fuese a parar a Foro Asturias, este partido podría sumar mayoría absoluta junto al PP, prescindiendo así del escaño logrado por el partido liderado por Rosa Diez. Tras la decisión del TSJA, ese diputado permanecerá sin asignar hasta que se repitan las elecciones entre los emigrantes de la circunscripción occidental y a expensas de lo que determine el Tribunal Constitucional (TC), ante el que el PSOE recurrirá la sentencia.

la fiscalía se opone Sobre las posibilidades de que este tribunal tumbe la decisión adoptada por el TSJA, el fiscal jefe del Principado, Gerardo Herrero, aseguró ayer que la fiscalía mantendrá la misma posición de oponerse a la petición de Foro. "Siempre dijimos que preferíamos la posibilidad de repetir las elecciones antes que anular el voto sin más", aseguró.

Por su parte, el presidente del Tribunal Superior de Justicia de Asturias, Ignacio Vidau, advirtió ayer de que la sentencia dictada de ordenar repetir las elecciones del voto emigrante correspondiente a la circunscripción occidental debe "acatarse y respetarse" al tratarse de una sentencia firme. Por tanto, estima Vidau, no cabe recurso ordinario sino recurso extraordinario de alzada ante el Tribunal Constitucional. "El fallo es claro y anula el voto de los emigrantes inscritos en la circunscripción occidental y manda que se proclamen nada más que los cinco primeros diputados dejando el sexto en función de la repetición de la votación".

Esta decisión mantiene en vilo las aspiraciones de los socialistas de Gobernar en Asturias después de que el vendaval de los populares el 20-N dejará al PSOE con un papel testimonial en la política de primera línea, donde solamente resistieron en la CAV y en Catalunya sin llegar a ser primera fuerza en ninguno de los territorios. El propio Alfredo Pérez Rubalcaba se ha mostrado convencido en más de una ocasión de que el PSOE acabará gobernando en el Principado, unas aspiraciones que el TSJA habría reducido a la mínima expresión a falta de lo que estime el Tribunal Constitucional.

De hecho, en las últimas semanas los socialistas habían intensificado los contactos con IU y UPyD para alcanzar un acuerdo de Gobierno que permitiera al PSOE volver a gobernar en Asturias tras la irrupción de Alvarez-Cascos en el Principado, una llegada que desbancó al socialista Carlos Areces al frente del Gobierno en su primer intento por alcanzar la presidencia del Principado.