Vitoria. La decisión del Departamento de Interior de adelantar la prohibición del uso de las pelotas de goma en las unidades de Seguridad Ciudadana, inicialmente prevista para el 1 de enero de 2013, ha provocado un gran malestar entre los agentes del Cuerpo, que creen que la ausencia de alternativas a las escopetas lanzadoras les deja indefensos en el ejercicio de su labor. Las quejas de los ertzainas se multiplicaron ayer en comisarías como Erandio o Durango, y fueron múltiples los escritos que se enviaron a los diversos jefes de unidad para trasladarles su desazón.
El Departamento salió al paso de la información publicada ayer por DNA asegurando que esta imprevista medida, que contradice el plan para limitar su uso de forma paulatina anunciado por el consejero Rodolfo Ares en el Parlamento Vasco, obedece a la localización de ocho cartuchos con exceso de pólvora en la comisaría de Donostia. En un comunicado, explicó que, hasta que se revise todo el material, se ha paralizado el uso de las pelotas de goma en todas las unidades de Seguridad Ciudadana -salvo en la er-tzain etxea de Bilbao-, suspensión que calificó de "provisional". El empleo de este arma como medida de disuasión está en el ojo del huracán tras la muerte de Iñigo Cabacas, que fue alcanzado por una pelota de goma disparada por un agente.
Este cambio de planes de un día para otro no ha sentado nada bien en el seno de la Policía vasca. El secretario general del sindicato Esan, Eneko Urkijo, describió ayer la situación como de "indignación total". A preguntas de este periódico, explicó que los ertzainas se sienten desamparados en el ejercicio de sus funciones: "Si se producen incidentes y están, por ejemplo, quemando ocho contenedores, ¿qué hacen las patrullas? Para cuando llegue la Brigada Móvil pueden pasar 45 minutos y se puede haber quemado el pueblo entero. ¿Esta es la imagen que queremos dar de la Ertzaintza, que deje que se queme todo? Es surrealista".
Añadía que, con esta medida, "se pone en peligro la integridad física del propio ertzaina, que si se ve acorralado, y antes de que le pase algo, puede verse obligado a sacar la pistola y pegar tiros al aire". "Si le están tirando piedras, no va a lanzar la porra a 50 metros de distancia", insistía. Por este motivo, consideraba que "es una decisión totalmente precipitada, sin consenso, base ni lógica". Eneko Urkijo concluía señalando que "vemos lógico que se retiren las pelotas si son lesivas, pero no de la noche a la mañana y sin plantear ninguna alternativa. Antes habría que formar al menos al personal en el uso de las nuevas pistolas".
Que se aclare La sección de ELA en la Ertzaintza también expresó ayer su desacuerdo con la gestión de la situación que está llevando a cabo la Consejería de Interior. Su portavoz Tomás Rodríguez opinó que el hallazgo repentino de los cartuchos defectuosos saca a relucir "el abandono y la dejadez total de los responsables del Departamento. ¿No se había hecho ningún control del material hasta ahora? Porque lo han comprado ellos". "Esto nos reafirma en nuestra petición de que dimitan o, si no tienen valentía para ello, sean cesados", agregaba.
El portavoz de ELA aseguraba, también a requerimiento de DNA, que "Ares dijo en sede parlamentaria que asume su responsabilidad política, pero en la práctica eso no significa nada y sigue en el cargo". Para Rodríguez, esta situación está demostrando que "el modelo que están imponiendo, pasando del preventivo con el nació la Ertzaintza a uno de mayor centralización y reacción, no va a mejorar las cosas". Se trata de una antigua reivindicación de ELA: que cualquier modificación en dicho modelo venga precedida de "un consenso al menos similar al que se logró con la creación de la Policía vasca".
Afirmó, por último, que "la mayor parte de los ertzainas quieren que esto se aclare de una vez, tenemos que saber todos, la sociedad, la familia, y sobre todo nosotros, lo que ha pasado. La investigación debe dejar clarísimo si se siguió el protocolo" en la fatídica actuación que culminó con la muerte de Cabacas, tras el partido entre el Athletic y el Schalke 04 en San Mamés. Y es que, según él, "si se siguió el protocolo y se produjeron estos efectos gravísimos, dicho protocolo pone en riesgo a todos los agentes, que se han podido ver o se verán en una situación similar".
Provisional Fuentes consultadas por DNA expresaban ayer su extrañeza por los bandazos que está dando el Departamento de Interior en los últimos días. El pasado jueves, Rodolfo Ares anunció en sede parlamentaria la progresiva retirada de la utilización de las pelotas de goma; el viernes, se emitió una orden interna en la que se especificaba cómo se debe emplear este elemento disuasorio; el sábado, de forma sorpresiva, se ordenó que deje de usarse, salvo excepciones -comisaría de Bilbao, Brigada Móvil y Brigada de Refuerzo-; y ayer, tras salir a la luz dicha orden, se alegó la localización de material defectuoso para justificarla.
Ayer se distribuyó otra orden entre todos los centros de trabajo de la Ertzaintza -la tercera consecutiva firmada por el jefe de Seguridad Ciudadana Josu Gotzon Lujua- en la que se comunicaba que inspectores de la Brigada Móvil y la Unidad de Investigación (UI) pasarán en los próximos días por las comisarías para "organizar la inspección de toda la cartuchería y de los impulsores de pelotas de goma".
En el comunicado que difundió ayer, el Departamento que dirige Rodolfo Ares explicó que la ertzain etxea de Bilbao queda exenta de la prohibición del uso de las pelotas de goma porque ya se ha comprobado que su cartuchería está en buen estado. Eso sí, "salvo las partidas utilizadas en la intervención de la noche del 5 de abril, que ya se encontraban bajo la tutela judicial". Los cartuchos defectuosos se encontraron el sábado en Donostia, "en el marco de la investigación abierta tras los incidentes".