Madrid. El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, anunció ayer ante el Comité Ejecutivo Nacional del PP que tiene previsto ampliar su plan de lucha contra el fraude fiscal, que ya se anunció en enero, a la Seguridad Social y al cobro de la prestación por desempleo. Este plan, que se pondrá en marcha en el plazo de un mes y que perseguirá a los trabajadores que no coticen o a aquellos parados que cobren el subsidio de forma irregular, contrasta con el hecho de que los Presupuestos Generales del estado incluyan una amnistía fiscal que permitirá a los grandes defraudadores lavar el dinero negro que han ocultado al fisco por una módica cantidad del 10% en tasas al Estado (el 8% en el caso de grandes empresas cuyos beneficios en el exterior sean tributados en españa).

"Vamos a intentar que todo el mundo cumpla con sus obligaciones y, si no lo hacen, tendrá la sanción que a cualquier persona normal y a cualquier demócrata le parece razonable", argumentó Rajoy a la hora de efectuar este anuncio no ante los medios, sino ante la cúpula de su partido. Además, es significativo que no diera más detalles que el enunciado en sí.

Esta nueva medida complementará en teoría la anunciada el pasado mes de enero por la vicepresidenta, Soraya Sáenz de Santamaría, quien adelantó la aprobación de un plan de prevención del fraude fiscal por el que se espera recaudar 8.171 millones de euros en 2012 y que se centrará fundamentalmente en la lucha contra la economía sumergida y los paraísos fiscales. Sin embargo, tanto los empresarios con negocios opacos o los evasores de impuestos, podrán regularizar su situación a través de la amnistía fiscal, mientras el plan para la Seguridad Social y los subsidios, no dejarán salida a los trabajadores en dificultades que no cumplan con la ley.

En concreto, el plan operará en tres ámbitos: la intensificación en el lucha contra incumplimientos tributarios, la mejora del control en la fase recaudatoria y la colaboración de la Agencia Tributaria con los organismos fiscales de las comunidades autónomas.

estrategia Por otra parte el residente del Gobierno, ya en clave política, asumió el discurso victimista para justificar los "duros" recortes culpando de ellos al anterior Ejecutivo. Reconoció (otra vez ante los suyos no ante los periodistas) que "no está en disposición de dar buenas noticias a los españoles" sobre la situación económica, pero expresó su convencimiento de que las medidas aprobadas permitirán que llegue pronto la recuperación. Unas medidas ante "las que no hay alternativa y si la hay, sería infinitamente peor", proclamó el líder de los populares en su segundo desplazamiento a la sede de Génova desde que es presidente del Gobierno.

A los 102 días de tomar las riendas del Ejecutivo, Rajoy afirmó que su Gabinete "sabe lo que hace" y que les guía "un plan de Gobierno sin improvisaciones", y si bien reconoció que la coyuntura es "dura" y "de extrema dificultad", animó a sus compañeros de partido a explicar las medidas que había que poner en marcha "sí o sí". En la misma línea, indicó que "este año no va a ser bueno" y aunque no entró en aspectos concretos de los Presupuestos, el presidente subrayó que servirán para enviar "una señal muy necesaria a los socios europeos y a los que prestan dinero a España".

Llegado este punto, Rajoy culpó de todos los males que ahora atraviesa el país al gobierno del PSOE. "Tengo que decir que esto es lo que hay que hacer para corregir los errores e incumplimientos del pasado y no ponernos peor", subrayó antes de asegurar que "si se hubiera cumplido el 6% de déficit el año pasado el ahorro se concretaría ahora en 18.000 millones y no en 27.000".

El presidente volvió a insistir en que las cuentas para 2012 son "duras", pero aún así "se caracterizan por ser también justas y equitativas, ya que suben ligeramente las pensiones, mantienen las coberturas por desempleo, congela el sueldo de los funcionarios y excluye la subida del IVA. Al mismo tiempo, inciden en que tributen más las grandes empresas y que sean las eléctricas las que carguen con gran parte del déficit del sector".