Berlín. Los contraanálisis realizados con semillas germinadas, procedentes de una granja sospechosa del noroeste de Alemania confirmaron ayer que son el origen de la virulenta variante O104 de la bacteria E.coli que ha causado 32 muertos en este país y uno en Suecia. Así, se confirma también que todas las sospechas que acusaban al sector hortofrutícola español como fuente de la epidemia fueron claramente infundadas.
Un portavoz del Ministerio alemán de Agricultura y Defensa del Consumidor anunció ayer que el Instituto Federal de Evaluación de Riesgos determinó que esa peligrosa cepa de la bacteria se encontraba en una partida de brotes procedentes de una granja de cultivo biológico de la localidad de Bienenbttel (Baja Sajonia, en la que varias empleadas contrajeron la enfermedad y que suministró productos a supermercados y a varios restaurantes, entre cuyos clientes se registró un elevado número de enfermos. Los contraanálisis confirmaron las pruebas realizados anteriormente por las autoridades sanitarias del estado federado de Renania del Norte Westfalia, que este viernes localizaron el foco infeccioso.
Las semillas germinadas en forma de brotes que dieron positivo fueron halladas en la región de Bonn, al oeste del país, en la basura de una familia en la que dos miembros enfermaron. Además, las autoridades sanitarias alemanas advirtieron ayer de que la amenaza de la variante letal de la E.coli continúa. Asimismo, mantuvieron la recomendación de no consumir semillas germinadas.
Por otro lado, la Oficina de Protección del Consumidor de Baja Sajonia consideró que la explotación foco de la infección de E.coli tuvo "mala suerte" y descartó sanciones y acciones legales porque cumplía con toda la normativa en vigor.
"Hasta ahora toda la investigación demuestra que la granja es impecable. Es higiénica y cumplía con toda la normativa", afirmó el portavoz de la Oficina, Gert Hahne.
"Lo mires por donde lo mires, no hay ningún fallo de la granja ni base legal alguna para responsabilizarles. No puedes castigar a alguien por tener mala suerte", dijo Hahne.