BRUSELAS. "Seguimos hablando del foco en Alemania y en ningún caso en España", ha subrayado la ministra Pajín en declaraciones a la prensa.
El Gobierno español ha reiterado, según Pajín, que está trabajando "sin cesar" para aclarar cuanto antes la situación, tranquilizar a los ciudadanos y proteger a los agricultores.
La ministra destacó que cuando se aclare todo el Gobierno pedirá "todo lo que tengamos que pedir" en alusión a los daños que esta situación ha provocado en el sector hortofrutícola español.
ALEMANIA, "COMPRENSIVA" Las autoridades alemanas han expresado hoy su "comprensión" por el"descontento" de los agricultores que están afrontando pérdidas por laalarma creada por la crisis de la bacteria 'Escherichia coli',' que hadejado al menos 14 muertos en Alemania y cuyo origen ha sido achacadopor las autoridades alemanas a los pepinos importados desde España.
"Tenemos una gran comprensión por el descontento y la preocupación de los agricultores que ahora sufren enormes pérdidas, a pesar de producir mercancías de gran calidad y de haberlo probado en algún caso con estudios", según ha dicho en un comunicado el secretario de Estado de Agricultura, Consumo y Alimentación alemán, Robert Kloss.
Con todo, Kloss ha defendido las medidas emprendidas por Berlín, que ha cerrado su mercado a los pepinos y otras hortalizas españolas y cuyo ejemplo ha sido seguido por otros países de la UE. "Mientras nos encontremos en un periodo de incertidumbre y no esté fuera de toda duda en qué parte de la cadena alimentaria han entrado los gérmenes, es necesario actuar con un cuidado especial", ha añadido.
El secretario de Estado alemán también ha abogado por examinar las "consecuencias" que esta crisis puede tener para los agricultores y ha dicho que Alemania y otros Estados miembros parten de la base de que la Comisión Europea "debería adoptar medidas adecuadas" para apoyar al sector.