MADRID. Así consta en el Real Decreto para el desarrollo del listado de Especies Silvestres en régimen de Protección especial y del Catálogo Español de Especies amenazadas, publicado hoy en el Boletín Oficial del Estado.

El Decreto que entrará en vigor mañana, jueves, establece que las especies incluidas en el listado serán objeto de un seguimiento especifico por las CCAA para evaluar periódicamente su estado de conservación.

Las especies amenazadas que aparecen en el mismo deberán estar incluidas en la categoría de peligro de extinción, cuando su supervivencia es poco probable, o en la categoría de vulnerables, cuando se trata de una especie que corre el riesgo de pasar a la categoría anterior.

Para el caso de las especies en peligro de extinción, la evaluación que deberán llevar a cabo las CCAA deberá incluir información sobre los cambios en su área de distribución, la dinámica y viabilidad poblacional, la situación del hábitat y la evaluación de factores de riesgo, entre otros.

Además de los citados animales, la lista cataloga también como en peligro de extinción al visón europeo, lince ibérico, la foca monje del Mediterráneo, el murciélago patudo, el desmán ibérico, el alcaudón, el escribano palustre, el pinzón azul, o el arao común.

En peligro de extinción están asimismo el zarapito real, la avutarda hubara, el urogallo cantábrico, el alimoche canario, el milano real, el águila imperial ibérica, el porrón, el lagarto gigante de Gran Canaria, y la libélula.

En cuanto a las especies silvestres en peligro de extinción, figuran ,entre otras, el helecho de sombra, el trebol de cuatro hojas, el sauco canario, el narciso de Asturias, la jarilla, el cabezón, el drago de Gran Canaria, el tomillo blanco, la orquídea de Tenerife y la siempreviva gigante.

LA BALLENA VASCA

La ballena vasca o franca glacial tiene una longitud aproximada de 14-18 m, aunque puede alcanzar los 24 m, un tercio de los cuales corresponde a la cabeza. Pesa entre 36 y 72 toneladas.

La piel, desnuda, es negra en el dorso y blanca en la zona del mentón. Mandíbula fuertemente recurvada, con el extremo anterior dirigido hacia abajo. Con engrosamientos o callosidades de color claro en la cabeza que varían en tamaño, grosor y posición, lo que permite su identificación individual. Coloración negra en los adultos con mancha ventral blanca en algunos ejemplares. En su boca cuelgan 300 barbas de más de 3 metros de longitud. No posee aleta dorsal ni pliegues en la garganta.

HÁBITAT

Se la puede encontrar en aguas poco profundas cercanas a la costa en bahías y penínsulas. Su ciclo anual ocupa dos tipos de hábitats; en verano se desplaza hacia aguas frías del Atlántico norte ricas en zooplacton en donde se alimentan. En invierno las hembras preñadas emigran hacia aguas subtropicales y allí tienen lugar los partos.

CAZA

A pesar de que en un inicio los medios de caza fueron artesanales, (txalupas y arpones), su explotación masiva, desde el siglo VIII hasta 1901, año en que se cazó la última ballena franca en Orio, provocó prácticamente su extinción. En la Edad Media, desde las atalayas de los pueblos de la costa del Cantábrico, los atalayeros daban la alarma cuando las ballenas, escapando de las aguas frías del Mar del Norte, se acercaban a estas costas. Entonces se preparaban pinazas con 10 o 15 remeros y un arponero que clavaba el arpón en la cabeza del animal, comenzando una dura lucha hasta que el animal era vencido y se remolcaba hasta la costa. Las disputas entre pueblos costeros eran comunes en la época. Las rivalidades fueron origen de numerosos conflictos y desafíos, siendo el embrión de las actuales regatas de traineras.

PESCA DE BALLENA VASCA EN EUSKADI

1805 Hondarribia

1854 Donostia

1878 Getaria

1893 Donostia

1901 Orio

1980 Golfo de Bizkaia