Lo "ideal" sería que Unicef desapareciese. Sin embargo, Joseba Madariaga insiste en subrayar que aunque vivamos en un "país rico" y "desarrollado" no significa que Euskadi esté exenta de problemas. Es por eso que el presidente de la ONG defiende esa Unicef de "km 0", que pone el foco en cuestiones que implican a los menores. ¿Por qué? "Porque los niños de hoy son los adultos del futuro. Que tengan un desarrollo como personas es muy importante como sociedad", sostiene.

Lleva tres meses en la presidencia de Unicef Euskadi. ¿Cómo ha acogido el cargo? ¿Qué retos tiene por delante?

-Me propusieron la posibilidad de ser presidente, y como el proyecto me gusta personalmente, me animé a ello. Tenemos por ahí un cartel que dice que el objetivo es que desaparezca Unicef. Pero yendo un poco más a pie de tierra, el objetivo es la convención de los derechos del niño y niña que se aprobó en la Asamblea de Naciones Unidas en 1989. Es nuestra hoja de ruta: lograr que sea una realidad.

Explíquese...

-Intentamos aterrizar esa convención a través de los programas que tenemos en los países desarrollados. El programa de ciudades amigas de la infancia, y los programas de educación en valores que tenemos con los colegios. Y además de eso, apoyos y convenios con empresas. Aquí hacemos intervención, porque en principio somos un país rico, por lo que tenemos esos programas, que pretenden acercar los objetivos de la convención. Quiero continuar tratando de adherir más ayuntamientos a ese programa de ciudades amigas, que más colegios se adhieran a nuestro programa de educación en valores, y continuar con esos convenios con las empresas. Que desaparezca Unicef sería la leche, pero estos son los pasos a dar a día de hoy.

Poco antes de ser nombrado presidente de Unicef Euskadi aprobaron la Ley de infancia y adolescencia en la CAV. ¿Qué ha supuesto?

-Llevaba 15 días en el cargo el día que se aprobó, fue una grandísima noticia. Es un avance muy importante en los derechos de la infancia. La ley tiene una virtualidad y es que es integral, y eso exigirá muchísima coordinación entre distintos departamentos e instituciones. Ahora toca desarrollarla, es el reto de esta legislatura. Euskadi se va a convertir en referencia en el conjunto del Estado porque nuestra ley es muy avanzada. 

¿Qué destacaría de ella?

-El ámbito de la protección lo teníamos razonablemente cubierto, pero el de la prevención me parece que es un avance destacable. Lo acogemos como una extraordinaria noticia, y nos pondremos a la vanguardia respecto al resto de comunidades.

¿Cómo se previene?

-Hay que analizar el ecosistema de actores que rodea los problemas, dando voz a niños, niñas y adolescentes, para que se diseñe el mecanismo para prevenir, es decir, los entornos seguros. Para abordar problemas como la inteligencia artificial, el bullying, violencia infantil...

La cifra de bullying ha aumentado casi un 40%.

-Es inaceptable que en una sociedad avanzada pasen ese tipo de cosas. Exige al sistema educativo poner toda la carne en el asador, todos los recursos para que eso no suceda. Y eso lo elevo un poco con nuestro programa de educación en valores. Hay 17 centros en la CAV que tienen ese distintivo. Educar no es solo la estructura curricular de los estudios que hacen los adolescentes, educar es algo más. Y nuestro objetivo es ese, educar también en valores. Y ahí entra el concepto del entorno seguro, padres, profesores, educadores... y que los propios niños, niñas y adolescentes definan los mecanismos necesarios para que no se produzcan estas situaciones. 

"Educar no es solo la estructura curricular, es algo más. El objetivo es educar también en valores"

Recogió el testigo de Isidro Elezgarai, presidente durante casi una década. ¿Qué legado le ha dejado en la ONG?

-Ha visibilizado la labor del comité del País Vasco de Unicef. Lo ha hecho muy muy bien, hay muchísima más gente que conoce más Unicef, y eso es gracias a Isidro. Y ha sido capaz de hacer del País vasco a Unicef. Es importante que la sociedad sepa también la labor que hacemos en la comunidad autónoma, en Euskadi. Es una gran persona que lo ha hecho muy bien, y una persona que cree en este proyecto.

¿Al hablar de Unicef se tiende a pensar en la labor en los países poco desarrollados, y no tanto en esa ONG de km 0?

-Exacto. Al ser un país rico afortunadamente no tenemos los problemas que tienen los países que están en vías de desarrollo. Por diversas razones: guerras, razones climáticas... no tenemos esos problemas, pero tenemos otros. Y es importante que la sociedad sea consciente de que tratamos de que los niños, niñas y adolescentes tengan un desarrollo como personas, como sujetos de derecho, es nuestra encomienda. Y la sociedad tiene que visualizar y visibilizar que eso no solo es importante en el momento actual para evitar que haya personas que caigan en situación de desprotección o vulnerabilidad, es algo bueno para el medio plazo para nuestra comunidad autónoma. 

Explíquese.

-Esos que hoy son niños son las personas que mañana se encargarán de trabajar en Euskadi, de hacernos crecer como sociedad. Es muy importante que sean capaces de tener un desarrollo normal para poder después ellos ser aportadores. Debemos entender que no solo hay problemas fuera, también en Euskadi tenemos que intentar hacerlo bien para que tengamos una sociedad con futuro.

"Es muy importante que los niños tengan un desarrollo normal para que en el futuro sean aportadores"

¿Dónde debe poner el foco Unicef de cara al futuro?

-Curiosamente, a pesar de estar en una sociedad desarrollada, si miras la última encuesta de condiciones de vida del INE de 2023 ves que el 20,1% de los niños, niñas y adolescentes de la CAV están en riesgo de pobreza. Es una cifra que llama la atención, y de la que tenemos que preocuparnos. La pobreza sitúa en riesgo de exclusión social, y vuelvo a decir: los niños de hoy son los adultos del futuro. Que tengan un desarrollo como personas es muy importante como sociedad.

Estrenamos Gobierno vasco. ¿Qué espera de él?

-Fortalecer la políticas relacionadas con la infancia. Hemos hablado antes de la tasa de pobreza infantil. Pero además, del total del gasto social en Euskadi, gastamos solo el 3,4% en protección social de niños y niñas. En Europa la media es del 8,3%.