nada es lo que parece, hay alguien que miente y un invitado famoso tiene que adivinar quién es”. Así presenta Adela Úcar el programa que hoy se estrena en ETB-2, El impostor, la última novedad en llegar a las parrillas de Euskal Telebista para esta temporada y el primer espacio de la presentadora vasca en ETB. La cita es para los miércoles, a las 22.30 horas.

Ayer, el director de Euskal Telebista, Edu Barinaga, dio el pistoletazo de salida a una de las novedades previstas para esta temporada en las parrillas de la televisión pública vasca. El concurso está producido y creado por Pausoka, y ha sido vendido a televisiones de otros países.

El impostor fue emitido en China el pasado año con gran éxito de audiencia (alguna de sus emisiones fue seguida por trece millones de espectadores). Perú lo estrenó en marzo y los resultados también han sido espectaculares. Estados Unidos e Italia también se han hecho con los derechos de este formato y se está negociando con Irlanda y Canadá.

un espacio viajero “Es un programa que ha tenido su recorrido fuera y que ahora regresa a casa, a Euskadi, para ser emitido en Euskal Telebista. Es una doble novedad: el formato nunca se ha visto aquí, y la presentadora, Adela Úcar, también se presenta en casa después de un recorrido por otras cadenas”, dijo Edu Barinaga, que alabó la valentía y la creatividad de productoras como Pausoka, las cuales son capaces de vender sus productos fuera, sumando además éxitos de audiencia. “Nosotros, trabajando como trabajamos con Pausoka, no podíamos dejar pasar esta oportunidad y hemos conseguido trabajar con ellos en este proyecto”.

“Yo no esperaba empezar a trabajar tan pronto, he sido madre hace poco, pensaba tomarme un tiempo más de descanso después de cuatro años intensos en 21 días. Pero la propuesta que me hicieron me encajaba como anillo al dedo y cuando vi el piloto, me lo comí entero con una sonrisa en la cara. Pensé: me lo estoy pasando bien viéndolo y también me lo voy a pasar muy bien haciéndolo. Eso a pesar de los madrugones que nos pegamos. Tenemos que estar a las nueve de la mañana en cualquier punto de Euskadi. Eso supone un trabajo previo: maquillaje, peluquería y demás. Así que me levanto sobre las cinco y media de la mañana”. Úcar manifestó su satisfacción por estar al frente de este programa de entretenimiento, un espacio muy diferente a los que ha hecho hasta el momento, más ligados al mundo de los viajes y al periodismo.

Oiarzabal, el primer día La presentadora bilbaína, que durante cuatro años ha protagonizado el espacio 21 días en Cuatro, también ha participado en otros espacios de éxito como Españoles en el Mundo y Mucho viaje. En la presentación de El impostor señaló que es un programa divertido en el que la estrategia de los cinco miembros que se presentan como familia (uno de ellos no lo es) es fundamental y requiere atender a los detalle, afinar en los nombres y establecer trucos para que el invitado no les pille en ningún renuncio que pueda dar pistas. “Hemos tenido en la grabaciones famosos que han empezando sospechando de uno y han acabado en el lado contrario”, comentaba ayer Adela Úcar.

Javier García de Vicuña, director del programa, comentó que es un espacio para verlo en familia e intentar adivinar quién no es quien dice ser. Los aciertos entre los invitados es de un cincuenta por ciento”.

El primer invitado que concursa en el programa es Juanito Oiarzabal, el popular alpinista y capitán de El conquistador del Fin del Mundo. Juanito se traslada a Irun para descubrir quién miente dentro de la familia Grande Gastaminza, formada por una madre, un padre, una hija y los dos abuelos. En un vídeo de dos minutos que se mostró en la presentación del programa, el montañero veía mentiras en las palabras de todos y ponía mucha atención en pequeños detalles.

También han accedido a participar en El impostor el remero y doble ganador de El Conquistador del Fin del Mundo Eneko Van Horenbeke, el actor Andoni Agirregomezkorta y las hormigas del programa El hormiguero, Juan y Damián, entre otros. Una vez finalizado el tiempo disponible, deberá decir un nombre. Si acierta ganará dos mil euros que irán a parar a una ONG de su elección; si por el contrario falla, serán la familia y el impostor quienes se lleven el premio.