La Comunidad de Navarra esconde maravillas que en verano se convierten en un reclamo mayúsculo. Su fiesta más emblemática, los Sanfermines invita a ciudadanos de todo el mundo a compartir del 6 al 14 de julio el jolgorio, la música, las tradiciones y los encierros que han dado fama universal a Pamplona. Una ocasión para descubrir su asombrosa arquitectura repleta de historia, las calles y disfrutar de la gastronomía más autóctona.
Para los que busquen iniciar un viaje mágico, deben saber que Navarra es la primera región que atraviesan los peregrinos que realizan el Camino de Santiago desde Francia. Naturaleza sin igual y espacios con alma para recorrer en esta aventura que cada año atrae a miles de turistas. El famoso tramo de Roncesvalles a Zubiri, se convierte en una propuesta de lo más atractiva para sumergirse en la historia y la espiritualidad de esta ruta milenaria.
Una tranquilidad con la que también es fácil conectar desde la impresionante Selva de Irati, conocida como el segundo hayedo-abetal más extenso y mejor conservado de Europa. En verano, sus bosques se llenan de exuberante vegetación, ríos cristalinos y senderos para explorar. Es un lugar ideal para practicar senderismo, ciclismo de montaña y disfrutar de la belleza de la naturaleza salvaje.
Estas son sólo algunas de las maravillas que esconde la comunidad foral cuando llega el buen tiempo. Una combinación de rica historia, tradiciones vibrantes, naturaleza y una gastronomía primorosa, que la convierten en un destino de lo más apreciado.