El Gobierno italiano aprobó ayer nuevas restricciones contra el coronavirus que incluyen un confinamiento casi total en todo el país la mayor parte del periodo de las fiestas navideñas, anunció esta noche el primer ministro, Giuseppe Conte.

"La situación sigue siendo difícil, también en toda Europa y el virus sigue circulando. Se deja doblegar pero no derrotar. Debemos intervenir y os aseguro que no es una decisión fácil. Por eso hemos adoptado un nuevo decreto equilibrado", dijo en rueda de prensa.

Según las nuevas normas, se decreta un confinamiento casi total en las fechas más importantes, los festivos y sus vísperas, entre el 24 de diciembre y el 6 de enero, mientras que se aligerarán algo las medidas en el resto de días laborales.

ITALIA SE BLINDA EN LOS DÍAS GRANDES DE NAVIDAD

En total serán diez días de "zona roja", es decir, cierre casi total, y cuatro de "zona naranja", algo menos estrictas.

Así, los días 24, 25, 26, 27 y 31 de diciembre, y el 1, 2, 3, 5 y 6 de enero habrá un confinamiento parecido al de la pasada primavera: prohibidos los desplazamientos entre regiones y solo se podrá salir de casa por comprobadas necesidades de trabajo, de necesidad o de salud".

Las actividades comerciales minoristas también están cerradas, excepto alimentación, farmacias, parafarmacias, quioscos de prensa y estancos, además de bares, restaurantes, heladerías, pastelerías y pubs, que solo podrán entregar a domicilio y, hasta las 22.00 horas, para llevar.

Se permitirá la realización de actividad física individual en las inmediaciones del domicilio, respetando la distancia de al menos un metro y con la obligación de utilizar equipo de protección.

En los días "naranjas" (solo el 28, 29 y 30 de diciembre y el 4 de enero), la diferencia es que estarán abiertas las tiendas y se podrá circular en el interior del propio municipio, y los bares y restaurantes seguirán cerrados aunque podrán entregar a domicilio.

PERMITIDO RECIBIR EN CASA A DOS PERSONAS MÁS

No obstante, para todo el período de Navidad, habrá una excepción a estas reglas: en los días de cierres se permitirán las visitas familiares, pero solo si se desplazan máximo dos personas, además de hijos menores de catorce años, que no se contabilizan.

"Es una medida pensada para permitir un mínimo de sociabilidad propio de este periodo", justificó el primer ministro.

Asimismo el toque de queda se mantiene fijado a las 22.00 horas en todo el territorio nacional.

El Gobierno ha impuesto estas restricciones para evitar una tercera oleada en enero pero también para tratar de doblegar una curva epidemiológica que baja menos de lo esperado cuando se aprobó el último decreto con limitaciones el pasado 3 de diciembre.

De hecho en las últimas veinticuatro horas se han contagiado casi 18.000 personas, una cifra que parece no bajar en estos días, y un total de 674 han perdido la vida, lo que eleva a 67.894 el balance de víctimas mortales, según confirmó hoy el Ministerio de Sanidad.

Conte además avanzó nuevas ayudas económicas "inmediatas" para los bares que deban permanecer cerrados durante el mencionado periodo por un valor de 645 millones de euros.

El Gobierno, del antisistema del Movimiento Cinco Estrellas y del centroizquierda del Partido Demócrata, con otras fuerzas de izquierda, viene siendo criticado en los últimos días por la tardanza en el anuncio de estas restricciones navideñas.

Por otro lado el primer ministro animó a la población señalando que "el final de esta pesadilla" está cerca y comenzará el próximo 27 de diciembre con el suministro de las primeras vacunas llegadas de Europa, aunque aseguró que no serán obligatorias.