Patricia López Arnaiz da vida en Ane a Lide, una joven madre que asiste al drama de la desaparición de su hija, un hecho que desencadena muchas cosas y consigue que se enfrente a sus propios demonios. Pero no es solo de eso de lo que se puede hablar con esta actriz vitoriana que se ha hecho un hueco enorme en la realidad actual, porque últimamente parece estar, como el perejil, metida en muchas salsas.

Vaya carrerón que lleva usted. ¿En qué proyectos anda metida ahora mismo?

Estoy rodando una serie para Netflix, Feria, y en enero, comienzo la grabación de una película, La cima, que va a dirigir Ibon Cormenzana.

Además ha gustado, y mucho, su personaje en la película Ane. Una historia inquietante.

Es lo que me comenta la gente que la ha visto. Lide, mi personaje, es una mujer que me ha gustado mucho encarnar. Me dicen que han estado en vilo durante toda la película y que les parece inquietante.

¿Cómo definiría a Lide?

Como una madre joven, porque lo fue a los 17 años, que se ha pasado toda su juventud dedicada a cuidar a una hija. La suya es una juventud que se ha quedado como en un lapsus. Lide no ha podido vivir esa etapa de la vida de una persona corriente y es algo que le queda pendiente.

¿Ha tenido una maduración personal muy rápida?

No, no, ella tiene un gran punto de inmadurez porque nunca ha terminado de cerrar ese ciclo. En la película se ve cómo a una edad determinada ella quiere ir de fiesta, se la ve con jovenzuelos, y también hay que comprender la relación que tiene con su hija. Su inmadurez está enquistada, pero detrás hay una mujer que ha tenido que sacarse siempre las castañas del fuego. Es una luchadora, una currela.

Pero su hija desaparece.

Sí, y es cuando Lide empieza a cuestionarse todo en su vida. Su hija, Ane, no va a dormir a casa y empieza la pesadilla. Ella vuelve su mirada al mundo de Ane y se da cuenta de que ha vivido con una desconocida.

La película fue recibida en Zinemaldia con honores.

No te lo puedes ni imaginar. David Pérez Sañudo, el director, estaba feliz de ver esa recepción. Solo estar en Donostia, en su festival, es algo muy grande para todos nosotros. Zinemaldia fue la manera más grande de presentar a Ane ante el público. Ganó dos premios, el de mejor guion y el premio Irizar, y resultó una experiencia increíble.

Y no era la primera vez que usted pasaba por Donostia.

He ido bastantes veces, pero esta ha sido la primera que he ido con un personaje protagonista. He estado antes con la trilogía del Baztán, pero esto ha sido muy distinto, muy especial. Ane es una película muy pequeñita y el recibimiento fue tal que el subidón resultó impresionante para todos nosotros.

Ane habla sobre todo de falta de comunicación entre padres e hijos.Ane

Sí. Habla de que algo funciona mal, de esos intentos torpes de comunicación y cariño que a veces tenemos con la gente a la que más queremos. La historia plantea cómo se puede llegar a viciar una relación y cómo nos tratamos entre los más cercanos, a veces con mucho descuido.

La literatura y el cine siempre han hecho hincapié en la dificultad que entrañan las relaciones entre madres e hijas.

Pienso que hay de todo, ¿no? pero es cierto que a veces se enquistan los roles y puede suceder lo que ocurre en la película. Lide y Ane viven solas y su vivencia puede ser muy intensa. Ambas son muy parecidas en carácter y chocan todo el tiempo. La madre descubrirá que apenas conoce a su hija, que ni sabe en qué mundo vive, cuando ella desaparece.

"La de actriz es una profesión que se ha instalado en mi vida"

Lleva usted trabajando un tiempo y se ha hecho un hueco importante en la escena.

Lo que se dice trabajando, desde muy chavala, porque cuando estaba estudiando ya trabajaba. Si te refieres a esta profesión, se van sumando los años, que no son tantos, pero ya llevo cuatro viviendo solo de ser actriz. Puedo decir que la de actriz es una profesión que se ha instalado en mi vida y con la que me siento muy feliz.

Ha hecho cine, quizá más que televisión, pero se le conoce más por este último medio.

Es cierto. La tele te da una visibilidad mucho mayor que el cine. A mí me gustan los dos medios y también me entusiasma el teatro, pero por lo que más me conoce el público es por la serie de La otra mirada. Hay veces que parece que he hecho más tele que cine, pero no es así, y reconozco que hay películas que también me han hecho conocida en esta industria, como Mientras dure la guerra, la trilogía del Baztán, El árbol de la sangre, La herida€ Creo que para el poco tiempo que llevo como actriz no me puedo quejar, porque he tenido muchas oportunidades. Bueno, y también fui la protagonista femenina en La peste, no lo olvidemos.

Luego el teatro es lo que ha quedado más relegado.

Pero fue en el teatro donde descubrí cómo me apasionaba ser actriz. Tenía claro que lo que me llamaba era el teatro. En el audiovisual comencé con trabajos muy pequeñitos y eso también lo pone muy difícil. Iba para un día al rodaje, no conocía a nadie y no tenía la seguridad del medio en el que estaba trabajando.

Pues ahora parece increíble que en algún momento se sintiera insegura...

Así era antes. En aquellos inicios sentía que el medio me podía y no disfrutaba. Estaba convencida que lo que me gustaba era el teatro y el audiovisual no me acaba de convencer. Esto fue así hasta que empecé a tener trabajos más potentes en cine y en televisión. El teatro se ha quedado un poco atrás, sí, pero no por falta de ganas. Ahora me están llegando algunas propuestas interesantes.

Las mujeres que interpreta son siempre muy diferentes, lo que indica que no le han encasillado en modelos concretos.

Es lo apasionante de los proyectos que me están ofreciendo. Ninguna mujer tiene un parecido con otra que haya interpretado. Por ejemplo, el personaje de Lide me ha aportado mucho, se aleja mucho de los anteriores y me ha puesto en un lugar muy diferente a mis anteriores interpretaciones. Me ha sacado de mis lugares de comodidad. Es una mujer fuerte, pero tiene esas cosas de ser imperfecta, de ser muy torpe, que te llegan al alma. Es una tía que es una macarra, una borde, y te lleva a zonas más incómodas.

Lide puede llegar incluso a caer mal y a que el espectador pase por alto el drama que está viviendo.

O incluso que opine que se lo merecía. Así me lo han dicho algunos espectadores de la película, pero ella no deja de tener también una gran humanidad, y a mí me gusta trabajar con esos contrastes.

"Lide es como tener un saco de boxeo y quedarte a gusto"

¿Hay algún personaje que haya hecho que se parezca a usted de un modo particular?

Todos tienen algo de mí, aunque quizá Lide se parezca muy poco, porque yo intento ser más diplomática y amable que ella en la vida. Todos mis personajes tienen algo que decir, pero quizá el de Lide es el que más terapéutico me ha resultado, porque no se corta ni un pelo en decir al que tiene enfrente lo que piensa. Aunque sea por un día tendríamos que ser todos como ella. Este personaje es como tener un saco de boxeo y quedarte a gusto.

¿Y cómo es su personaje en La cima

Es una mujer alpinista que ha conquistado los 14 ochomiles. Tiene como referencia e Edurne Pasaban. Ha cumplido sus objetivos en lo profesional, ya no hay más ochomiles que subir en el planeta, y supuestamente ha alcanzado sus deseos, pero, ¿qué pasa cuando tus sueños ya se han cumplido? La película reflexiona sobre cómo por ese esfuerzo se ha podido sacrificar lo más personal.

Para acabar, hablemos de Feria

Feria es un pueblo en Andalucía, la serie arranca con la aparición de 23 muertos, y yo interpreto a una policía que con su compañero va a investigar estos hechos. Todo tiene que ver con un tema tipo sectas.

Y para despedir esta charla. recordarle que su nombre suena con fuerza para los próximos premios Goya.

Ya, y en los premios todo puede ser. Me pone muy nerviosa, pero estoy contenta de que se hable de Ane de cara a los Goya. La película en su conjunto tiene muchas posibilidades.

PersonalEdad

: 39 años (15 de abril de 1981).

Lugar de nacimiento: Vitoria-Gasteiz.

Trayectoria: Hasta 2017, hizo pequeños papeles en cine. Ese año, se convirtió en Rosaura en la trilogía del Baztán. Aunque el personaje era secundario su interpretación sedujo al mundillo audiovisual, así que lideró el elenco femenino en las dos temporadas de La peste para Movistar+. También fue una de las protagonistas de La otra mirada, serie que se emitió en La 1. El árbol de la sangre (Julio Medem) y Mientras dure la guerra (Alejandro Amenábar), junto con Ane (David Pérez Sañudo) han sido sus últimos trabajos en cine. Ahora está grabando Feria, un thriller para Netflix.