madrid - Ciencia ficción, drama, comedia, historia? son algunos ingredientes de El Ministerio del Tiempo, nueva producción de TVE creada por Pablo y Javier Olivares. El rodaje arrancó el pasado jueves en el Palacio de la Duquesa de Sueca, en pleno centro de Madrid. Una serie de género fantástico y aventuras en la que la comedia y la ironía se mezclan con sentimientos y emociones para narrar el día a día de un Ministerio creado para que la Historia no sufra digresiones temporales que cambien el presente. El paso hacia otras épocas se realiza a través de puertas vigiladas por las Patrullas del Ministerio. Su objetivo: detectar e impedir que cualquier intruso del pasado llegue al presente -o viceversa- con el fin de utilizar la Historia para su beneficio. Para ello, las Patrullas tendrán que viajar al pasado y evitar que lo logren.

Rodolfo Sancho encabeza el reparto. Da vida a Julián Martínez, ATS del SAMUR de nuestros días. Un hombre feliz hasta que perdió a su esposa en un accidente. Desde entonces, su carácter se ha oscurecido y su comportamiento en el trabajo es temerario. Su entrada en el Ministerio le salva porque le permite reinventarse y ser valorado. El valor y su escaso apego a su propia vida son sus mayores cualidades. Aura Garrido es Amelia Folch, una mujer de finales del siglo XIX. Muy avanzada para su época pero muy ingenua para el siglo XXI, fue de las primeras mujeres que entraron en la Universidad de Barcelona. Inteligente, con memoria fotográfica y trabajadora, su capacidad para analizar situaciones, su conocimiento de la Historia y su dominio de la Literatura española y del latín la convierten en el cerebro del comando. El tercer componente es Alonso de Entrerríos, soldado de los Tercios de Sicilia del siglo XVI, interpretado por Nacho Fresneda. Castellano, enjuto y poco comunicativo, no le gusta tener de jefa a una mujer. Es el soldado perfecto, experto tirador y estratega y el que se pone al mando de la situación cuando se requiere fuerza. Además de ellos, Cayetana Guillén Cuervo como una mujer escéptica y pragmática nacida en los años 30; Juan Gea, de quien se desconoce la época en que nació, un funcionario serio, solitario y perfeccionista siempre preocupado por la vida de sus reclutados; Jaime Blanch, contemporáneo subsecretario de Misiones Especiales que despacha con el ministro; y Natalia Millán, espía para los franceses en la II Guerra Mundial. - DNA