madrid - El documental arranca con la historia de Hildegard von Bingen, una monja alemana del siglo XII que inspiró el personaje de Caris en Un mundo sin fin. Cuando murió a los 79 años se había convertido en la mujer más influyente de la Cristiandad. El Vaticano la canonizó en 2012. Más de un siglo después, la escritora y mística Marguerite Porete fue más lejos al cuestionar la raíz de las enseñanzas de la Iglesia. En 1310 fue quemada en la hoguera. Follett se inspiró en ella para crear otro personaje de Un mundo sin fin. La tercera de las mujeres que retrata es Juana de Arco, que inspiró la lucha en Francia contra los invasores. La segunda parte del documental se centra en la peste negra, una de las pandemias más devastadoras de la historia de la humanidad. - DNA
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