El entorno Pablo González ha lanzado una nueva campaña para exigir el final de la situación que vive el periodista vasco desde que fue detenido en Polonia mientras cubría la huída masiva de refugiados ucranianos. a

Familiares, amigos y compañeros de profesión han iniciado una recogida de firmas a través de la plataforma OSOIGO.COM, en la que esperan alcanzar los 1.500 apoyos necesarios para que la cuestión será remitida al Congreso de los Diputados.

"Pedimos que se acabe con la incomunicación de Pablo, que ya se alarga desde el día de su detención, el 28 de febrero. A pesar de que Pablo cuenta con un abogado polaco desde principios de mayo, pedimos que se facilite el asesoramiento legal por parte del abogado que él designó y que asesora a la familia, Gonzalo Boye, y que se le garantice una comunicación habitual para poder preparar su defensa.", reclama el entorno del periodista.

Sus familiares y amigos también piden que González pueda hablar con su esposa y con sus hijos, así como que se respete su presunción de inocencia, y que no se le abandone en un país que consideran está haciendo caso omiso a las normativas europeas de derechos humanos.

En prisión provisional incomunicada

El 28 de febrero González fue arrestado en la localidad polaca de Przemysl, muy cerca de la frontera con Ucrania bajo la acusación de espiar para el Kremlin. Al vizcaino solo se le permitió realizar una llamada a su mujer en la que le solicitó que se pusiera en contacto con su abogado.

Desde entonces las autoridades polacas no han permitido al periodista ponerse cin contacto ni con su familia, ni con su abogado, Gonzalo Boye, y permanece en prisión provisional incomunicada. Este 25 de mayo el tribunal de Przemysl aceptó la petición del fiscal de prolongar su situación durante otros tres meses.