- El enfrentamiento entre el Gobierno y la oposición a cuenta de la gestión de la pandemia regresó ayer al Congreso de los Diputados de la mano de la comisión de investigación sobre la gestión de las vacunas. El dictamen recibió el visto bueno pero sin holguras y entre acusaciones de sectarismo por parte de varios partidos de la oposición.
El Pleno del Congreso aprobó con 162 votos a favor, 148 en contra y 22 abstenciones el dictamen de la Comisión de Investigación que analizó la gestión de las vacunas contra el covid-19, por la que han pasado desde noviembre 25 comparecientes, ninguno de ellos propuesto por la oposición, según denunciaron grupos como PP, Vox y C’s.
El resultado final de los trabajos recomienda promover mayor transparencia en los acuerdos de adquisición anticipada de vacunas con las empresas farmacéuticas en lo que respecta al coste real de producción e investigación, un acceso equitativo mundial a las vacunas y evitar que la propiedad intelectual sea un obstáculo para ello. También pone en valor el éxito de la campaña de vacunación española y pide colaborar con la UE para afrontar en mejores condiciones posibles futuras crisis de salud global.
Los grupos parlamentarios que conforman el Gobierno de coalición evitaron llamar al exministro de Sanidad, Salvador Illa, la actual titular, Carolina Darias, y la cara visible de la gestión de la pandemia, Fernando Simón. “Esta no ha sido nunca una comisión de investigación. Es una pantomima, una parodia”, se quejó el diputado del PP José Ignacio Echániz, que consideró que el trabajo ha sido “inútil” porque al vetarse las comparecencias de los grupos que no apoyaban al Gobierno se perdió la oportunidad de reconocer errores.
Más duras fueron las críticas de la diputada de Vox, Jara Moreno, cuyo grupo ni siquiera participó en las sesiones. “Nos impusieron la lista de comparecientes de forma antidemocrática, sin respetar nuestra cota de participación. No tuvimos más remedio que dejar de hacerle la ola a la izquierda social comunista y a los nacionalistas”, ha dicho la diputada, que asegura que las conclusiones parecen redactadas “por el Gabinete de la ministra”.
A esas quejas, añadió el diputado de C’s Guillermo Díaz el malestar porque no se haya abordado la “vergüenza” de que más de mil personas se colasen para recibir la vacuna antes de lo que les correspondía.
Respondió la socialista Ana Prieto con una defensa del éxito del proceso de vacunación y con el reproche de que “siguen instalados en la pataleta política”. “Aquí nadie ha impedido nada. Ustedes hicieron propuestas de comparecientes pero no tuvieron los votos suficientes para que salieran aprobadas”, espetó la socialista, que ha recordado que las listas cerradas ya se usaron en otras comisiones. “No les gustan las mayorías democráticas”, les ha dicho.
En representación del PNV, la parlamentaria Josune Gorospe justificó su abstención en que los trabajos tendrían que haber recogido recomendaciones para avanzar en los déficits con las vacunas, el refuerzo de la sanidad exterior y el refuerzo de la vacunación en cualquier lugar del mundo.
El dictamen. Fue aprobado ya en la Comisión y ayer fue apoyado en el Pleno por ERC, el PSOE y Unidas Podemos, con lo que se pone fin al análisis de la inversión y la compra anticipada, la aplicación de la estrategia de vacunación y sus resultados.
Campaña. Se pone en valor la campaña de vacunación “gracias al sistema público sanitario, a las personas que lo hacen posible, a nuestra atención primaria, imprescindible reforzar para afrontar los retos del futuro”.