PAMPLONA. La plaza situada ante el Palacio de Justicia de Pamplona ha sido escenario de momentos de gran tensión cuando los cientos de manifestantes que están expresando su indignación por el fallo judicial de La Manada han hecho retroceder al cordón policial que protege la entrada.
El enfado de los concentrados por la sentencia ha provocado empujones y encontronazos entre los manifestantes y los policías, aunque no se han llegado a producir incidentes de gravedad.
Al grito de "Esta Justicia es una mierda" y "No son abusos, es violación", los manifestantes muestran su disconformidad con el fallo que condena a penas de nueve años de prisión a cada uno de los cinco de los miembros de La Manada por un delito continuado de abuso sexual con prevalimiento de una chica en los sanfermines de 2016.
La protesta a la entrada del juzgado, convocada por los colectivos feministas Andrea, Lunes Lilas y Gafas Moradas tiene como lema "¡No es no! ¡Justicia!", se mantiene a la entrada de los juzgados pamploneses ante un gran despliegue policial y con una nutrida presencia de medios de comunicación.