Polémica en torno a un examen de Matemáticas de Selectividad

Los alumnos, sorprendidos por lo que ellos califican como una prueba “mucho más difícil de lo esperado” crearon esta petición dirigida al Gobierno Vasco y a la UPV/EHU. En ella reclaman que el examen “sea retirado u omitido, puesto que los últimos años no se había dado semejante nivel en una selectividad de Matemáticas”, ante lo que la UPV alega que “todos los contenidos que aparecían en el examen estaban en el desarrollo curricular”. Pese a que los alumnos reconocen que los contenidos sí estaban en el temario, explican que la forma de preguntarlos era mucho más complicada que en años anteriores.

La queja principal no se refería a que hubiese preguntas sobre contenidos que no hubieran estudiado, sino al formato que tuvo el examen. El malestar no se circunscribió a los estudiantes, sino que profesores también hicieron una valoración negativa del examen. “Este año no nos convocaron a la reunión de coordinación porque iba a ser la última Selectividad, pero nos dijeron que mantendrían el formato y los contenidos de años anteriores”, explica una profesora de Matemáticas. Sin embargo, los alumnos se encontraron con algo muy distinto a lo que estaban acostumbrados. Mientras que los exámenes suelen tener una cara de enunciados “sencillitos”, este año tenían “más de una cara de enunciados complejos y muy largos”, señala esta profesora, quien aclara que pese a ser más difíciles que en años anteriores, no eran ejercicios que los alumnos no pudiesen hacer con tranquilidad, pero “en esas condiciones de presión y nerviosismo, era imposible”.

“No han hecho nada que no pudieran hacer, porque todo entraba en el currículo, pero se han pasado”, explica un alumno que se examinó de la materia. Tal y como ellos relatan, el examen era un conjunto de aquellos ejercicios más difíciles que aprenden durante el curso pero que rara vez entran en el examen de Selectividad. “Eran problemas que hasta el profesor te dice que si entra uno de esos, cojas la otra opción”. Por ejemplo, en los gráficos les solían dar 3 o 4 inecuaciones para delimitar un plano, “pero este año había que obtenerlas del texto”.

Polémica recurrente Esta no es la primera vez que la polémica rodea a un examen de Selectividad en la CAV. En el año 2011, los alumnos pusieron el grito en el cielo por una pregunta mal formulada en la prueba de Química en euskera. La UPV decidió excluir dicha pregunta y buscaron una formula que no perjudicara a los alumnos. Para ello, corrigieron el examen con dicha pregunta sobre 10 por un lado, y por otro lado corrigieron el examen sin la pregunta y lo prorratearon sobre 10. De entre ambos resultados elegían aquel que beneficiara al alumno. La medida no contentó a todos los alumnos y algunos de ellos exigieron la repetición de la prueba, lo que finalmente no sucedió. En dicha ocasión la media de aprobados en Química fue del 51%, algo inferior a la media del año anterior (58%), y bastante menor que la media de los dos años siguientes: 83% en el 2012 y 77% en el 2013.

Este año, una movilización de alumnos a través de change.org. reclama que se anule la prueba de Matemáticas. Además, desde algunos colegios también se están preparando cartas de reclamación para intentar conseguir alguna solución ante el cambio de formato que ha habido.

78% de aprobados. El año pasado, el examen de Matemáticas aplicadas a las Ciencias Sociales tuvo un índice de aprobados del 78% y una media de 6,55.

30% matriculados. Aproximadamente un 30% del conjunto de los alumnos matriculados el año anterior en la Prueba de Acceso a la Universidad optó por la asignatura Matemáticas aplicadas las Ciencias Sociales .

Enunciados complicados. Los alumnos reconocen que no eran ejercicios que no hubieran estudiado previamente, pero ante la complejidad de los enunciados y el cambio de formato perdieron mucho decidiendo qué opción hacer.

Incluido en el temario. La Universidad del País Vasco alega que todo lo preguntado en la prueba “estaba incluido en el desarrollo curricular de la asignatura”.