VITORIA. ¿Cómo es el horario de Vadillo Asesores?

El horario de la mañana es flexible para poder responder a las necesidades de la gente que tiene que conciliar con la familia, que tiene niños... Hay disponibilidad para poder entrar de ocho de la mañana a nueve y media. Depende de lo que adelantes la entrada, variará la salida. El horario para ir a comer oscila entre la una y las dos y media. Luego el horario de tarde es fijo, de tres y media a seis y media porque hay que dar servicio al público.

¿Y al mediodía?

Dependiendo del horario que hagas, saldrás antes al mediodía. En principio, dispones de dos de la tarde a tres y media para comer, en función del horario de entrada. Nosotros somos un grupo de empresas que se dedica a la asesoría en el campo fiscal, laboral, contable, hay una rama que es de seguros y otra rama que es de abogados. Y por la tarde, siempre tiene que haber alguien de cada rama para dar servicio a los clientes.

En su caso ¿ha elegido algún horario en particular?

Yo tengo un horario especial, uno más flexible todavía. Puedo entrar a las siete de la mañana y salir a las dos del mediodía porque por la tarde estoy estudiando un master de Relaciones Laborales en Leioa.

La mayoría elige su horario en función de sus necesidades familiares; veo que no es su caso.

Bueno, yo también tengo hijos pero son ya mayores y no dependen de mí, por lo que puedo permitirme este horario para compatibilizarlo con los estudios.

¿Qué le parecen las nuevas modalidades de jornada para los funcionarios de Lakua?

Aquí también tenemos esas modalidades. Aunque yo hago la jornada continua, la gente también tiene jornada partida y hay gente que tiene reducción de jornada.

En Euskadi, no es común disponer de unos horarios tan abiertos.

Es que a veces la flexibilidad es bastante relativa porque hay muchas opciones como es la mía de reducción que no te la permiten. O tienes un problema familiar y tienes muchas pegas para poder acogerte a una reducción... Aquí somos unos privilegiados porque se han intentado adaptar los horarios a las necesidades de cada trabajador. Siempre se hace un estudio y se mira cada caso, intentando dar las facilidades precisas a cada persona.

¿Sería posible coger un año sabático?

De momento nadie lo ha pedido, aunque dentro de nuestra política sí cabría. Si el trabajador pidiese un año sabático o una excedencia voluntaria se estudia el caso y lo lógico es que no exista ningún problema.

¿Desde cuándo funcionan así?

Llevamos aplicando estas medidas desde hace seis o siete años.

Detrás de toda esta política, ¿habrá trabajadores satisfechos?

Por supuesto. Si a la gente se le adaptan los horarios, si la gente trabaja a gusto, eso repercute en el trabajo... se rinde mucho más y la gente está muy contenta.

Parece que es más caro, pero han demostrado que no es así.

Para nada porque un trabajador satisfecho aporta más rentabilidad y resulta más productivo.

Ustedes estar para calentar la silla

Nosotros racionalizamos el trabajo. Las reuniones están bastante controladas porque se te puede ir mucho tiempo en esos temas. Pero, por supuesto, todo el mundo puede salir a tomar un café.

Derribe el mito: ¿son las mujeres las que más se acogen a los horarios flexibles?

Es que es así, no lo puedo derribar. Son las mujeres las que más tienen adaptada la jornada. Sobre aproximadamente 22 trabajadores, habrá siete con un horario especial.

A los amigos les darán ustedes mucha envidia.

Sí porque, además, somos de los pocos que tenemos un horario continuo de 8 a tres de la tarde desde el 1 de junio al 30 de setiembre. Pocas empresas se pueden permitir estar cuatro meses con este horario continuo.