vitoria. El MarmitaCo se hace mayor. Seis años después de labrarse un nombre en su local de Judimendi, la sociedad que capitanea Josean Merino ultima estos días su traslado al centro de Vitoria, concretamente al número 3 de la calle San Antonio, un local cuyo último inquilino fue la arrocería Tapelia, víctima de una mala gestión a los pocos meses de su inauguración. Merino y su equipo están convencidos de que no correrán la misma suerte, entre otras cosas porque a lo largo de su carrera ya han demostrado ser capaces de "levantar" locales ubicados fuera del circuito gastronómico convencional. La nueva aventura del chef vitoriano iniciará su andadura antes de Semana Santa. Será un local con "mucho recorrido" que dará vida a esta céntrica arteria vitoriana en materia hostelera. Un soplo desaparecido desde que primero el mítico bar Loretxu y después el Bogotá echaran la persiana años atrás. La nueva criatura de Merino contará con una zona de bar-cafetería para desayunos, pintxos y cafés, y otra que acogerá el restaurante, con una capacidad para 45 comensales. El local contará además con una espectacular cocina que quedará a la vista de clientes y viandantes.
Por su parte, el viejo local de Judimendi, inaugurado en 2007, seguirá operativo, aunque con otra filosofía. Los fines de semana continuará atendiendo el restaurante, pero entre semana la actividad mutará hacia conceptos más formativos como un laboratorio de cocina para profesionales y aficionados o un txoko privado donde empresas y particulares podrán llevar a cabo jornadas a la carta.
La mejor barra de pintxos Las razones del traslado al centro vienen de lejos, matiza Merino. "Necesitábamos dar más continuidad a nuestro concepto y de forma más seguida, así que no dudamos cuando surgió esta posibilidad", insiste por teléfono. El salto de calidad no repercutirá en el precio con el que el nuevo local saldrá al mercado en unas semanas. Así, la tarifa media de un menú del día rondará los 14-15 euros, mientras que la factura en la carta oscilará entre los 25-30 euros. La nueva aventura de este cocinero autodidacta- premio a la mejor Barra de Pinchos y Tapas de España 2011 y segundo puesto del certamen de Euskal Herria de Pintxos celebrado el pasado mes de noviembre en Hondarribia, entre otros- contará con un equipo de diez profesionales, empeñados en "ajustar los tiempos entre las diferentes franjas horarias que tendrá el restaurante; será un reciclaje continuo", insiste el chef.
No será éste su último proyecto empresarial, que recientemente ha impulsando la iniciativa cocinerosenred.com para generar un movimiento que consolide los hábitos sostenibles en sus negocios, así como un consumo más justo y responsable. Un estudio reciente prevé un incremento en el consumo de alimentos ecológicos en España en torno al 12% anual hasta 2020, y sobrepasar los 12.000 millones de euros de facturación dicho año.