Vitoria. Los responsables del sindicato ErNE de Policía son conscientes de que la Guardia Urbana de Vitoria atraviesa por un periodo de recortes obligados, pero quiere que la llegada de la tijera se aplique de forma lógica, homogénea, transparente y con contraprestaciones en forma de formación para los agentes. Después de celebrar el pasado lunes seis asambleas informativas consecutivas en la comisaría de la Policía Local de la capital alavesa a las que acudieron, según indicaron ayer sus portavoces "prácticamente toda la plantilla", hoy les toca reunirse con el nuevo director de Seguridad Ciudadana, Antón Sáenz de Santa María, y con el recién nombrado comisario jefe, José Carlos García Marcos, para trasladarles el "profundo malestar" que vive la plantilla tras la aplicación de los primeros recortes en sus salarios y ante la amenaza de posibles nuevas mermas en las nóminas. "Sabemos que la situación es complicada, pero llevamos muchos años sin convenio y ahora no entendemos los recortes sin que se den las necesarias explicaciones y con diferencias tan grandes entre unos y otros agentes. Nadie sabe los porcentajes que se aplican ni cuánto menos van a cobrar. Queremos los datos sin enmascarar, con luz y taquígrafos", indicaron ayer los representantes del sindicato.

Ante la irreversibilidad de las rebajas salariales, la plantilla le ha comunicado a ErNE que, como parte de su desarrollo de la carrera profesional, desea una mejora en la formación de los agentes. Los responsables del sindicato comunicarán hoy a la jefatura que es necesaria la formación continua de los agentes "porque la calle resulta cada vez más compleja y el reciclaje profesional en la Policía Local de Vitoria resulta totalmente insuficiente". Los enlaces afirman que las convocatorias de cursos en Arkaute son muy escasas y que cada vez que surgen las plazas son excesivamente limitadas, de manera que "aunque hay muchos agentes que quieren acudir, simplemente no pueden y los criterios de selección para cubrir las asistencias son, cuando menos, dudosos".

Desde ErNE también se subrayará la necesidad de regular la segunda actividad de los agentes en base a la Ley de Policía que se debate en el Parlamento vasco y no a través de Función Pública, como se pretende desde el Ayuntamiento. Además, se pedirá que si se echa mano del Estatuto Básico de los funcionarios para aplicar los recortes en el pago de la nocturnidad o de los festivos, que no se recurra a otras varas de medir para cuestiones que benefician a los agentes. "Lo aplican sólo para lo que les conviene, pero no por ejemplo para otras cuestiones, como la de los permisos. El Estatuto Básico contempla seis días para asuntos propios en toda España, pero en la Policía Local sólo disponen de dos días. Si estas son las reglas de juego que eligen, que las utilicen para todo y no en un sólo sentido", manifestaron.