vitoria. Las obras de construcción de la residencia de Lakua van a buen ritmo y se espera que concluyan en enero del próximo año. La intención es que el centro sustituya a la unidad psicogeriátrica que acoge actualmente Arana, que se encuentra ya obsoleta después de tantos años. Tanto sus usuarios como el personal serán trasladados a las nuevas dependencias una vez estén ya en funcionamiento.
Así lo avanzó ayer el diputado general de Álava, Xabier Agirre, durante la celebración del Pleno de las Juntas Generales de Álava. Durante su intervención, Agirre también desveló que, finalmente, la residencia contará con una gestión directa, es decir, será la Diputación quien se haga cargo de ella sin intermediarios privados.
Una de las prioridades será cumplir un dictamen elaborado por el Servicio foral de Arquitectura, que establece que la residencia de Arana precisa ser derribada ante los problemas de evacuación que presenta. Por eso, el nuevo destino de trabajadores y usuarios de la unidad psicogeriátrica será el inmueble que se construirá en Lakua, y que tiene capacidad para medio centenar de personas.
En la actualidad, Álava cuenta con un total de 1.009 plazas residenciales, y hay una lista de 120 personas, tal y como informó ayer Agirre. Sin embargo, no parece que la nueva residencia vaya a aligerar dicha lista de espera en vista del uso que se le va a dar como unidad psicogeriátrica. Ésta es una de las máximas preocupaciones del PP, tal y como denunció ayer durante el Pleno.