Aunque hoy en día dependemos en gran medida de los farmacéuticos y de medicinas, en ocasiones recurrimos a remedios naturales para aliviar muestras dolencias. Hablamos de soluciones caseras como el vinagre, que provienen de generaciones mayores y que han perdurado hasta nuestros días, y las cuales nos reportan excelentes resultados, además de ser económicas.

Lo mejor de todo es que son trucos muy sencillos para poner en práctica y que podemos elaborar con ingredientes que solemos tener en casa. Gracias al uso del vinagre, podremos poner fin al dolor de pies en cuestión de muy pocos minutos.

Vinagres caseros de todo tipo. Archivo

Un remedio tradicional

Para ponerlo en práctica, tan sólo necesitamos un poco de vinagre. Este jugo está muy presente en la limpieza del hogar, aplicándose en algunas tareas del hogar tales como la limpieza de suelos o WC, además de en ciertos electrodomésticos.

Asimismo, este remedio tradicional se puede emplear en nuestra salud. Es más, nos reporta muchos beneficios sin tener que recurrir a medicinas artificiales. Hablamos de sumergir los pies en una palangana llena de vinagre.

Usando concretamente el de sidra de manzana, podemos conseguir resultados increíbles, pues alivia el dolor de pies y así cuidamos de nuestro bienestar. Así, tendremos más posibilidades de ahorrarnos visitas al fisioterapeuta o al médico.

¿Cómo funciona en nuestros pies?

En primer lugar, coge una palangana y llénala de agua caliente. Después, vierte varias gotas de vinagre de sidra de manzana en el recipiente. Ahora, añade unas cuantas gotas de aceite esencial de lavanda.

Tras este paso, deja que la mezcla repose durante unos veinte minutos. Una vez pase este tiempo, ya podrás meter tus pies en la palangana con vinagre. Gracias a sus cualidades exfoliantes, conseguirás que tu piel esté más suave que nunca.

Esta técnica facilita enormemente la relajación muscular, a la vez que alivia toda la tensión acumulada en los pies. Por si fuera poco, el vinagre contiene propiedades antiinflamatorias que pueden contribuir a reducir la hinchazón y la sensación de pesadez en los pies.

Aliviar los pies de dolencias ya es posible gracias al vinagre Pixabay

Los beneficios del vinagre

El vinagre posee una gran capacidad exfoliante y suavizante para la piel. Un baño de pies con una cantidad considerable de este líquido diluido ayuda a eliminar las células muertas de la piel y callosidades, y a terminar con el ardor causados ​​por algunas dermatitis.

Este jugo también puede aplicarse para tratar los callos y los hongos en las uñas. Para los callos, basta con sumergirlo en un algodón con este líquido y colocarlo sobre la zona. El vinagre hará que la piel endurecida a ablandar la piel endurecida, facilitando su eliminación.

En cuanto a los hongos, se recomienda empapar los pies en una solución de vinagre diluido durante unos cuantos minutos al día. Esto puede ayudar a combatir la infección y prevenir su propagación, manteniendo sana esta parte del cuerpo.

Botella de vinagre blanco. Freepik

Obtención del vinagre

El vinagre es un líquido que se extrae a partir de la fermentación acética del alcohol, generalmente derivado del vino, sidra, cerveza, malta, arroz o frutas. Este proceso de fermentación convierte el etanol en ácido acético con bacterias del género 'Acetobacter’. El contenido de ácido acético en el vinagre suele oscilar entre el 5 y el 8%.

En la cocina, el vinagre se emplea como condimento y conservante, aportando un sabor ácido a ensaladas, adobos, salsas y otras preparaciones. Además, tiene propiedades antimicrobianas, lo que lo hace útil para la limpieza y desinfección en el hogar.

También se ha utilizado tradicionalmente en remedios caseros para tratar diversas afecciones, aunque su efectividad en muchos de estos usos no siempre está respaldada por evidencia científica.

Aceite, vinagre y sal listos para condimentar ensaladas. Freepik