El representante del Frente Polisario en el Estado, Abdulah Arabi, ha reprochado este miércoles al Gobierno que negocie con Marruecos el espacio aéreo del Sáhara Occidental y ha destacado que jurídicamente "la soberanía del mismo pertenece al pueblo saharaui" y "en última instancia" a España como potencia administradora.

Abdulah Arabi ha hecho estas afirmaciones en un comunicado después de que el Gobierno español informara, en una respuesta parlamentaria, de que está negociando con Marruecos el traspaso de la gestión del espacio aéreo del Sáhara Occidental.

"Mientras no concluya el proceso de descolonización que permita ejercer al pueblo saharaui su legítimo e inalienable derecho a la autodeterminación e independencia, España seguirá siendo la responsable de cuanto ocurra en el territorio ocupado ilegalmente por Marruecos", ha manifestado Arabi.

La respuesta del Polisario se da después de que desde Moncloa hayan afirmado este mismo miércoles que las conversaciones ya se han iniciado "en este ámbito", y hayan aclarado que los contactos con Marruecos se dan en aras "de conseguir mayor seguridad en las conexiones y cooperación técnica".

Nueva etapa de relaciones con Marruecos

El presidente Sánchez y el rey de Marruecos, Mohamed VI, se reunieron en Rabat en abril de 2022 con el objetivo de iniciar una nueva etapa en la relación entre ambos países, firmándose una declaración conjunta que, en el punto siete, indicaba que se "se iniciarán conversaciones sobre la gestión de los espacios aéreo", sin mayor aclaración.

Con este diálogo, Marruecos busca que España deje de ser quien gestiona el espacio aéreo sobre el Sáhara, algo que a día de hoy se hace desde Canarias. Por su parte, Arabi ya mostró su preocupación por posibles negociaciones relativas a los espacios aéreos y marítimo.

Instituto Cervantes en el Aaiún

Por otro lado, Arabi se ha pronunciado también respecto a la polémica sobre los planes del Instituto Cervantes para abrir una extensión en El Aaiún, en el Sáhara Occidental, así como de impartir clases en los campamentos de refugiados saharauis en Rabuni (Argelia).

Para Arabi, la idea de inaugurar una nueva sede "en la ciudad ocupada de El Aaiún es cuestionable jurídicamente" y perjudica directamente "la credibilidad" del propio Instituto Cervantes, pues significaría plegarse a los intereses de Marruecos "para blanquear la ocupación militar del Sáhara Occidental".

Fuentes del Cervantes consultadas reconocieron la semana pasada que el instituto "desea instalarse cuanto antes en El Aaiún" pero por el momento no hay ninguna fecha prevista ya que aún no se ha localizado el emplazamiento en que se instalaría. La organización confirmó así lo manifestado previamente por el Gobierno, que afirmó que "se contempla la apertura de una extensión siempre que se localice un espacio que reúna las condiciones idóneas".

Sin embargo, el Ejecutivo ha descartado este miércoles que el Instituto Cervantes fuera a abrir una sede en El Aaiún "si por sede se entiende la figura del centro que se regula en su Ley y Reglamento", y ha aludido de nuevo a las condiciones de idoneidad para una futura extensión.