- El PNV llevará mañana al Congreso la problemática que se avecina si el Gobierno español mantiene su decisión de no prorrogar el estado de alarma más allá del 9 de mayo. La portavoz de Sanidad del Grupo Vasco, Josune Gorospe, interpelará a la ministra del ramo, Carolina Darias, si el Ejecutivo de Pedro Sánchez está reconsiderando un cambio de postura respecto a las medidas que se deben adoptar, y lo hará en una sesión de control a la que se llega con las vacilaciones que se transmiten desde Moncloa en las últimas horas respecto a esta polémica que podría limitar la actuación de las comunidades. Tanto la vicepresidenta primera, Carmen Calvo, como la titular de Defensa, Margarita Robles, se han pronunciado “en una dirección algo menos monolítica de lo que venía haciendo” el Gobierno, constata Gorospe, lo que evidencia que en el seno del Gabinete de coalición no hay una postura sólida acerca de la idea de que las autonomías disponen de herramientas suficientes para luchar contra las consecuencias del coronavirus.
Desde el PNV constatan que ambas dirigentes socialistas “han admitido este fin de semana que no prorrogar el estado de alarma podría limitar la actuación de las comunidades”, al no poder tomar decisiones que “limiten los derechos fundamentales de la ciudadanía”. Una pérdida de la cobertura jurídica que ya ha censurado el propio Gobierno Vasco. Las precisiones desde el Ejecutivo español se suceden: Calvo reconoció que perdería vigencia el toque de queda nocturno, y Robles admitió las dificultades para limitar la movilidad con carácter general. El posicionamiento de Moncloa se halla marcado por la cita con las urnas en la Comunidad de Madrid y el hipotético desgaste que podría sufrir el PSOE en un tema del que durante meses ha hecho bandera la oposición y la presidenta madrileña, Isabel Díaz Ayuso. “Es preocupante que el Gobierno condicione su toma de decisiones a unas elecciones”, lamentó ayer Gorospe en una entrevista a Bizkaia Irratia.
Los jeltzales confían en que para el 9-M Sánchez “tenga otra respuesta” y plantee “medidas que amparen a las instituciones con responsabilidades en el ámbito sanitario”. En este sentido, el PNV considera que el líder socialista tiene “dos vías abiertas” que debería utilizar para sus resoluciones, “si quiere que esas decisiones tengan apoyo”, en referencia al diálogo con los partidos políticos, por un lado, y las instituciones autonómicas, por otro. Una actitud que debería plasmarse con “cercanía, seriedad y discreción, y no llevar todas las decisiones al Consejo Interterritorial de Salud y casi imponer como un rodillo todo lo que se plantea, sin dialogar”. Cabe recordar que Moncloa descartó convocar la conferencia de presidentes que prometió para decidir sobre la continuidad de la alarma. “Lamentablemente todo está condicionado por las elecciones en Madrid, y en el Congreso vemos que las iniciativas que los partidos que están en campaña presentan son en gran medida para entrar en esa liza, y utilizan la Cámara baja como si fuera una plaza pública de Madrid, y eso tiene efectos dañinos para la política”, afeó Gorospe.
El PNV comparte la visión de otros grupos respecto al comportamiento de Sánchez en este mes previo al fin del estado de alarma, y es que se está erigiendo en protagonista de la campaña electoral, más incluso que su candidato Ángel Gabilondo, “y es que se ha metido de cabeza en ella, parece que el candidato es él”, en tanto que los comicios se han planteado, según los jeltzales, “de modo plebiscitario, como una competición entre los gobiernos de Madrid y del Estado, como un Ayuso contra Sánchez, y eso tendrá consecuencias y efectos en los debates del Congreso”.
Las autonomías se han visto obligadas a someter al presidente español a una presión unánime para prorrogar la alerta o activar un plan alternativo. Así se ha pronunciado no solo el PNV, sino también EH Bildu, PDeCAT, C’s, Más País, Compromís y BNG, entre otros, o incluso Unidas Podemos, que ve aventurada la intención de Sánchez de no prorrogar la alarma. El PP ha registrado una reforma de la Ley Orgánica 3/1986 de Medidas Especiales en Materia de Salud Pública que habilitaría a las comunidades a limitar la movilidad y las reuniones tanto en lugares determinados, como en su número de personas. El jeltzale Josu Erkoreka señaló en la entrevista concedida a este diario su confianza en que “antes o después Sánchez tanteará a los grupos. Sospecho que lo hará. No creo que lleguemos al 9 de mayo en esta situación”.
Desde la aprobación de estos últimos seis meses de estado de alarma, el 29 de octubre de 2020, Sánchez ha comparecido en el Congreso para rendir cuentas en tres ocasiones: el 16 de diciembre de 2020, el 24 de febrero de 2021 y el 14 de abril de 2021. Sus tres intervenciones iniciales suman menos de tres horas, y además ha mezclado la rendición de cuentas con otros asuntos por los que también estaba obligado a comparecer ante la Cámara o con anuncios importantes que han difuminado el debate sobre el decreto. Aunque el Gobierno no tiene intención de volver a pasar por el calvario de las votaciones quincenales, se multiplican las dudas sobre el horizonte a corto plazo, acerca de si Sánchez se sacará un as de la manga y de si, finalmente, habrá garantías para una seguridad jurídica máxima.
“No se pueden imponer todas las decisiones como un rodillo en el Consejo Interterritorial de Salud”
Portavoz de Sanidad del Grupo Vasco