- Primero fueron PP y Ciudadanos, y ayer fue Vox quien anunció que recurrirá ante el Tribunal Constitucional (TC) la reforma de la ley de Educación, la denominada ley Celaá o LOMLOE, si elimina el castellano como lengua vehicular y tras el blindaje por ley de la inmersión lingüística tras el pacto entre PSOE, Unidas Podemos y ERC. El partido de ultraderecha cree que esta ley supone “la culminación de un proyecto que tiene como meta la ruptura de la unidad nacional por la vía de los hechos”, al ser las comunidades autónomas las que podrán decidir cuál es la lengua vehicular en su territorio.
“La riqueza cultural de España y su diversidad lingüística se utilizan como instrumentos para la secesión, pasando por encima de nuestra Constitución que, en su artículo tercero, establece claramente el deber de conocer y expresarse en la lengua oficial del Estado para todos los españoles”, denunció Vox.