vitoria. El endeudamiento de la Comunidad Autónoma Vasca salió ayer de nuevo a colación en el Parlamento de Gasteiz a propósito de una pregunta de la líder popular Arantza Quiroga, quien reclamó al lehendakari, Iñigo Urkullu, la puesta en marcha de un plan para reducir la deuda pública de Euskadi. Tal reclamación no fue bien acogida por el líder del Ejecutivo, que recordó a la dirigente del PP que el endeudamiento se disparó durante la legislatura del socialista Patxi López mientras estaba apoyado por la formación popular, y que la CAV tiene que endeudarse ahora para pagar precisamente los intereses y amortizaciones de aquellas alegrías financieras.
Volvía así al Parlamento Vasco un debate reproducido en varias ocasiones durante la legislatura del PSE, cuyo Gobierno tiró del endeudamiento para pagar el gasto corriente de su administración, una práctica por la que ya entonces le sacó los colores el PNV, en aquel momento en la oposición.
La presidenta del PP de la CAV, Arantza Quiroga, aprovechó el pleno de control al Gobierno, para presentar al lehendakari lo que presentó como un plan de estabilidad económica que reduzca el gasto público en casi 1.500 millones de euros en el plazo de dos años y recorte la deuda pública de manera que se sitúe en 2.500 millones.
Quiroga reprochó que con el Gobierno del PNV la deuda se ha incrementado en 1.075 millones, "alcanzando los 8.279 millones de euros, cantidad que representa el 12,8% del PIB. La líder del Partido Popular reconoció que de 2008 a 2012 -que abarca casi toda la legislatura de Patxi López- fue cuando se produjo la escalada en el endeudamiento, que llegó a aumentar hasta los 7.204 millones a finales de 2012, cuando Patxi López cedió la makila de lehendakari a Urkullu.
"Necesitamos bañarnos de realismo y concluir ya que tenemos la obligación de parar esta sangría, porque no podemos endeudarnos traspasando el problema del ajuste a generaciones futuras". "En cuatro años la deuda pública se ha multiplicado por once -espetó Quiroga a Urkullu- Así no podemos seguir; de seguir esta tendencia, usted va a tener el triste privilegio de ser el lehendakari que pase a la historia por el ser el primero que destine la mayor partida económica para pagar la deuda".
intereses y amortizaciones Urkullu no evitó el cuerpo a cuerpo y aprovechó el mismo argumento esgrimido por Quiroga para recordarle que de 2009 a 2011, periodo en el que el Gobierno del PSE recurrió a la deuda al superar el déficit fijado, fue el PP el que apoyó todos los presupuestos socialistas. "No dijo ni una palabra cuando el Gobierno anterior inició su andadura con una deuda del 1% del PIB y la dejó por encima del 10% tres años después", argumentó Urkullu.
En este punto, recordó a Quiroga que la CAV tiene que endeudarse, más de lo que le gustaría al PNV, en gran parte porque hay que pagar a los acreedores los intereses y las amortizaciones de la deuda del Gobierno anterior, que el PP apoyó. Urkullu reconoció que este año han sido 448 millones los que se van a destinar a créditos y amortizaciones, y el año que viene tendrá que llegarse a 800 millones, cantidades que no se podrán destinar a inversiones en la economía productiva ni a gasto en políticas públicas, en un momento en el que las arcas de la Administración sufren con crudeza la crisis. Pero no por deseo de su Ejecutivo, sino por obligación. "Este Gobierno ni está gastando ni va a gastar más de lo que tiene", aclaró.
progresión El líder del Ejecutivo argumentó que, si su Administración siguiera la "progresión" marcada por las políticas llevadas a cabo por el entonces lehendakari López, "dentro de cuatro años, la deuda de Euskadi se podría situar en el 90% del PIB, que por cierto es como se encuentra la deuda del Estado con el Gobierno del PP". Urkullu insistió en que el Gobierno anterior, con el apoyo del PP, gastó más de lo que tenía sin que los populares lo intentaran impedir, lo que ha traído consecuencias al Gobierno Vasco actual. "Fue tal el desaguisado en Euskadi y en España que el PP y el PSOE se vieron obligados a aprobar una modificación de la Constitución para evitar en 2011 que se siguiera haciendo crecer la deuda sin control", recordó en su respuesta a Quiroga.
El lehendakari criticó que PSE y PP echaran mano de la deuda pública "de forma constante", tanto que se lo tuvieron que prohibir a sí mismos" mientras que el ejecutivo jeltzale actual actúa "con rigor" ya que "el déficit y deuda están acordados con el Gobierno central para 2013 y 2014, y se cumplen".
Durante su intervención en el pleno de Parlamento, Arantza Quiroga insistió en que la Administración vasca reduzca tanto el gasto corriente como la deuda pública: "Necesitamos acordar lo básico, porque debemos mejorar las cosas sin gastar más dinero, gestionando la escasez", remarcó.
Arantza Quiroga conversa con Iñaki Oyarzábal, ayer durante el Pleno de control en el Parlamento Vasco. Foto: alex larretxi