Vitoria. Suma y sigue. La entente soberanista que da cuerpo a Amaiur presenta hoy en sociedad la llegada de un nuevo socio, el quinto: Abertzaleen Batasuna; el partido hermano de Aralar en Iparralde, que reforzará el carácter nacional del nuevo "sujeto político" compartido que ya ultiman, reforzando así su raigambre a ambos lados de la muga.
El Trinquet Modern de Baiona será el escenario elegido por la izquierda abertzale, Aralar, EA, Alternatiba y AB para escenificar el nacimiento de este pacto a cinco, fruto de su voluntad de presentarse de ahora en adelante ante los vascos con una estrategia compartida "en el conjunto de Euskal Herria".
Según fuentes de la coalición, tres son las prioridades que vertebran este embrionario "acuerdo estratégico nacional" que hoy se presenta en Baiona: "Pacificación y normalización, construcción nacional de Euskal Herria y lucha contra la crisis desde parámetros claramente progresistas y de izquierdas". La concreción de su desarrollo quedará para más adelante; para cuando el trabajo de cocina en el que ya se hayan inmersas alumbre un nuevo pacto que dote a este proyecto de un programa a la altura de las circunstancias y le permita adecuar su actuación a los nuevos tiempos -marcados por la consolidación de la paz y la crisis-, así como a las aportaciones de los nuevos socios.
Diferentes ritmos Aparte de impulsar el arraigo de su proyecto en el País Vasco francés, la entrada de AB confirmará el respeto a los ritmos de los diferentes territorios que ahora marca los pasos de este proyecto de izquierdas y abertzale en lo relativo a la construcción nacional. Atrás quedan los tiempos en los que se planteaba una estrategia única para tres entidades sociopolíticas -la CAV, Navarra e Iparralde- en las que la realidad demostró que se han desarrollado sentimientos, necesidades y recelos distintos, lo que confían en que contribuya a partir de ahora a sus expectativas electorales. Especialmente en Navarra y en el País Vasco francés, donde Abertzaleen Batasuna había labrado un camino propio en los últimos 20 años -en 2001 rechazó sumarse a Batasuna precisamente por la cuestión de los ritmos y, especialmente, la actitud ante ETA- que ahora transitarán estas formaciones de la mano.
Llamada al diálogo Mientras se acaba de dibujar este proyecto, los representantes de Amaiur en el Congreso presentaron ayer en Madrid el recurso por el que defienden su derecho a tener grupo propio. A las puertas del Tribunal Constitucional, su portavoz Xabier Mikel Errekondo reiteró su crítica al PP por haberse valido de su mayoría para "acallar" su voz basándose en criterios "exclusivamente políticos", lo que le llevó a invitarle una vez más a participar en "los nuevos tiempos" abandonando su cerrazón, y a pedir al Gabinete Rajoy la puesta en marcha de "una mesa" en la que "todas las partes" puedan aportar y avanzar hacia "la solución definitiva del conflicto".