Sara Khadem ocupa el puesto 804 del mundo en la Federación Internacional de Ajedrez. Su nombre ha saltado a la palestra después de que la iraní compitiera sin velo en el Mundial que estos días se celebra en la ciudad de Almaty, en Kazajistán. Un gesto que muchos han interpretado como una muestra de apoyo a las protestas que tienen lugar en Irán desde el mes de septiembre tras la muerte de la joven kurda Mahsa Amini, a la que habían detenido por llevar mal puesto el velo.

Khadem ha descartado regresar a su país cuando termine su participación en el Mundial de partidas rápidas y se instalará junto a su marido, el director de cine Ardeshir Ahmadi, y su hijo en una ciudad del Estado que no ha revelado por razones de seguridad.

Sorpresa de la Federación de Ajedrez iraní

Irán ya ha mostrado su sorpresa por lo ocurrido. El presidente de la Federación de Ajedrez de ese país, Hasan Tamini, ha afirmado que no esperaba el gesto de la joven ajedrecista de 25 años "porque había participado en torneos anteriores cumpliendo las leyes" del país".

Precedentes

No es la primera vez que una ajedrecista decide competir sin el velo obligatorio para la federación iraní. Ya en 2020 la veterana Mitra Hejazipour fue expulsada por asistir al campeonato de ajedrez rápido en Moscú sin el hiyab.

Más cercano está el caso de la escaladora iraní Elnaz Rekabi, que fue detenida por las autoridades iraníes después de competir en Corea del Sur sin velo. Fue una de las primeras deportistas que, en el marco de las protestas, se quitó el hiyab para competir. Tras regresar a su país su paradero fue una incógnita durante varios días, y después se supo que el régimen habí aincendiado la casa familias de la deportista.