Los ministros de Asuntos Exteriores del club de naciones industrializadas del G7 concluyen este viernes el encuentro que arrancó ayer en Münster (oeste de Alemania) y que se centra en la guerra de Ucrania y en otros temas como el trato a China y las protestas en Irán.

La reunión terminará con una rueda de prensa de la ministra de Exteriores alemana, Annalena Baerbock, que ejerce de anfitriona de sus homólogos de Estados Unidos, Canadá, Reino Unido, Japón, Francia e Italia.

Está previsto que en la jornada de hoy los ministros se centren en la represión de las protestas en Irán y en la petición por parte de Washington de expulsar a Irán de la comisión de derechos de la mujer de la ONU, según informaron medios alemanes.

Además, según adelantó Baerbock, el viernes participarán en las deliberaciones los ministros de Exteriores de varios países africanos para debatir su posible contribución a la diversificación del suministro energético a nivel internacional y otras cuestiones estratégicas.

Acompañarán el encuentro varias manifestaciones en las calles de Münster, entre ellas una convocada por Fridays for Future para protestar contra el cambio climático y otra para solicitar más apoyo a los manifestantes iraníes.

A lo largo de la primera jornada del encuentro este jueves, los ministros tenían previsto centrarse, según informó Baerbock, en Ucrania, y en particular en la situación de cara al invierno ante los ataques rusos contra la infraestructura energética.

Los jefes de la diplomacia de los países industrializados recibieron además, según lo planeado, un informe de primera mano sobre la situación de parte de su homólogo ucraniano, Dmytro Kuleba y abordaron las sanciones contra Rusia, así como el impacto de la guerra en los precios de la energía.

El encuentro se desarrolla en el emplazamiento simbólico del ayuntamiento histórico de Münster, donde se firmó en 1648 la Paz de Westfalia, que según los historiadores sentó las bases del orden internacional moderno, basado en la soberanía nacional.