- En su primera intervención en el juicio político a Donald Trump, los demócratas mostraron ayer un vídeo que reconstruía minuciosamente el asalto al Capitolio y que provocó un gran silencio en el hemiciclo, mientras algunos republicanos miraban para otro lado.
El objetivo del legislador Jamie Raskin, el demócrata que lidera la acusación, era intentar probar que la retórica de Trump incitó la violencia del ataque al Capitolio, donde cinco personas murieron.
Raskin pidió a los republicanos que se centren en los “hechos fríos y duros” y rechacen los argumentos de la defensa de Trump, que quiere que el proceso gire en torno a su constitucionalidad y en si el Senado puede enjuiciar a un expresidente. Asumir esa evasión de responsabilidad es para Raskin “una invitación para que el presidente haga lo que quiera”, incluyendo el “uso de métodos violentos”.
Para probar su argumento, mostró un vídeo de 13 minutos que reconstruía paso lo que ocurrió el 6 de enero, empezando con el discurso que Trump dio instando a sus seguidores a marchar a la sede del Congreso, que iba a refrendar el triunfo de Biden. “Después de esto vamos a andar hacia allá y yo estaré con vosotros. ¡Vamos a ir al Capitolio!”, dijo Trump, cuyas palabras resonaron en el hemiciclo del Senado antes de presenciar el asalto de la multitud al Capitolio.