atenas - La lista de reformas que el Gobierno griego está negociando con sus acreedores contempla medidas que aportarán al Estado ingresos adicionales por valor de 3.700 millones de euros, procedentes básicamente de medidas fiscales y de privatizaciones, según la prensa. El paquete de privatización del puerto de El Pireo y los 14 aeropuertos regionales aportará, según las filtraciones del ministerio de Finanzas, ingresos de unos 1.500 millones de euros. El primer ministro, Alexis Tsipras, quien explicó ayer sus objetivos en el Parlamento, aseguró este fin de semana en una entrevista que el Gobierno plantea un modelo distinto de privatizaciones que el Ejecutivo anterior. Así, está previsto que en todos los proyectos de relevancia, el Estado mantenga una participación mayoritaria, con el objetivo de garantizar el respeto de las leyes laborales y medioambientales.
El resto de los ingresos provendrán de la lucha contra la evasión fiscal y de las iniciativas para promover la devolución de las deudas a Hacienda y a la Seguridad Social, como lo son la amnistía fiscal y la ley que permite el pago en cuotas, aprobadas en el Parlamento hace diez días. Según los cálculos presentados a Bruselas, unos 725 millones de euros provendrán de la recuperación de dinero negro de depósitos en el extranjero, 350 millones de la lucha contra el fraude en el IVA (impuesto al valor añadido), 270 millones de la modificación de los tipos del impuesto a la renta y 300 millones de la devolución de las deudas a Hacienda. Además, el Gobierno de Tsipras espera recaudar 600 millones de la venta de las licencias de televisión privada. En los últimos años, las televisiones privadas griegas han funcionado ilegalmente, pues no pagaban las licencias correspondientes de emisión.
las apuestas electrónicas Otros 250 millones se esperan recaudar de la lucha contra el contrabando de combustible y otros 225 millones del tráfico de tabaco. Finalmente, el Gobierno de Tsipras confía en recuperar 225 millones gracias al fortalecimiento de los mecanismos de recaudación de impuestos y otros 200 millones de las licencias de apuestas electrónicas.
Las reformas, que, según ha insistido el Gobierno, no contemplan ni una sola medida que acentúe la recesión, excluyen exigencias planteadas por las instituciones que antes formaban la troika (Comisión Europea, Banco Central Europeo, Fondo Monetario Internacional) como la supresión de la paga extra para las pensiones bajas o el objetivo de déficit cero de las pensiones complementarias.
Por lo tanto, del total anterior hay que restar unos 600 millones de euros de la restauración de la paga extraordinaria para las pensiones inferiores a 700 euros, mientras la negativa a establecer una meta de déficit cero en las arcas de las pensiones complementarias costará unos 326 millones de euros.
Los cálculos gubernamentales parten de un superávit primario (que excluye el pago de intereses de la deuda) para este año del 1,5 % del producto interior bruto y de un crecimiento económico del 1,4 %.
Grecia espera obtener cuanto antes luz verde de sus socios a este catálogo de reformas, para así desbloquear al menos parte de la ayuda pendiente y atajar los graves problemas de liquidez. En abril, el Estado debe afrontar pagos por un total de 1.200 millones de euros en devolución de créditos y vencimientos de Letras del Tesoro.
todavía sin acuerdo Según la Comisión Europea, “todavía no se ha llegado” al momento en que se logre un acuerdo entre las cuatro instituciones acreedoras y Grecia sobre una lista de reformas detallada que el país se comprometa a aplicar, en palabras de su portavoz Margaritis Schinas. “Y es por eso que las negociaciones deben beneficiarse de una nueva recopilación de datos en Atenas”, añadió Schinas.
“No hay que esperar listas por ahora, hay que trabajar en las propuestas antes, aún queda”, explicaron otras fuentes europeas. Con este ritmo, todas las fuentes descartan que los ministros de Economía y Finanzas de la zona del euro (Eurogrupo) puedan mantener un encuentro esta semana en el que dar su aprobación a la lista de reformas, paso imprescindible para que Atenas pueda acceder a los 7.200 millones de euros que quedan pendientes del rescate al país. Lo que sí se espera es una conferencia telefónica del Grupo de Trabajo del Euro mañana miércoles, en la víspera de las festividades católicas de Semana Santa, si se dan “progresos”, explicaron fuentes de la eurozona.
La lentitud con la que avanzan los contactos y la delicada situación financiera y fiscal de Grecia hacen prever que el receso vacacional no será tal ni en Bruselas ni en Atenas. “Todos son conscientes del tiempo limitado, todo el mundo está trabajando, noche y día, con el mismo espíritu, diría movilizados, para que podamos obtener este éxito”, aseguró Moscovici, quien recordó que Grecia tiene que hacer frente a pagos inminentes.- Efe