TÚNEZ. Los españoles, algunos de los cuales fueron al parecer rehenes de los terroristas, lograron dejar la zona acompañados de funcionarios de la embajada de España en Túnez.

La legación ha confirmado, igualmente, que entre las víctimas mortales podría haber ciudadanos españoles mientras que fuentes de Seguridad tunecinas cifraron en al menos uno los españoles muertos y en varios los heridos.

En el atentado y posterior operación de rescate han muerto un total de 22 personas, de ellos al menos 17 turistas de seis países: Sudáfrica, Polonia, Italia, Alemania y Japón, además de España. En esa cifra de fallecidos se incluyen también a tres de los asaltantes.

El español muerto, que no ha sido identificado, es uno de los 17 turistas extranjeros que han perecido en el peor atentado sufrido por Túnez desde que 2002 cuando una veintena de turistas alemanes perdieran la vida en un ataque similar en la isla de Djerba.

Además, varios ciudadanos españoles quedaron en manos de los terroristas durante las seis largas horas que ha durado el ataque, que concluyó con el asalto de las fuerzas de seguridad tunecinas al Museo del Barco.

Esos españoles formaban parte de un grupo de cuarenta hispanohablantes que realizaban un crucero por el mar Mediterráneo.

En el citado grupo había diez mexicanos, cuatro argentinos, cuatro colombianos, cuatro brasileños y el resto españoles, explicó a Efe el guía del grupo, Wasel Busid.

Según Busid, al salir del autobús un joven de unos 22 años abrió fuego con una metralleta y mató a siete personas antes de que sus compañeros retuvieran a los rehenes y se atrincheraran en el jardín que une el Museo del Bardo y el Parlamento.