managua. Los medios nicaragüenses han publicado una carta firmada por el extrabajador de la Agencia Nacional de Seguridad estadounidense (NSA) Edward Snowden, con fecha 30 de junio, en la que solicita formalmente asilo a la Embajada de Nicaragua en Moscú por temor a ser sometido en Estados Unidos a un "trato inhumano" o "incluso la muerte". En la misiva, Snowden denuncia que es perseguido debido a sus "opiniones políticas" y su ejercicio de "libertad de expresión". Snowden recuerda además que destacados miembros del Congreso le han calificado públicamente de "traidor" y han pedido su encarcelación e incluso su ejecución. Algunos de los cargos presentados ya en los tribunales por el Gobierno incluyen delitos recogidos en la Ley de Espionaje de 1917 y podrían suponer una pena de cadena perpetua. Así, el extrabajador de la NSA argumenta que su petición de asilo cuenta ya con el precedente del caso del fundador de Wikileaks, Julian Assange y con el soldado Bradley Manning, quien colaboró con Wikileaks para revelar crímenes de guerra cometidos por Estados Unidos. Manning "ha permanecido en aislamiento antes de su juicio y el relator de la ONU sobre torturas considera que Manning fue sometido a actos crueles e inhumanos cometidos por el Gobierno de Estados Unidos", indica. Snowden destaca asimismo que en el proceso judicial contra Manning se están utilizando documentos secretos y testimonios secretos. "Creo que en estas circunstancias es improbable que yo pueda tener un juicio justo (...) y afronto la posibilidad de una cadena perpetua o incluso la muerte", advierte. El presidente de Nicaragua, Daniel Ortega, ya dijo el pasado viernes que prestaría asilo político al extrabajador de la CIA Edward Snowden. "Está claro que, si las circunstancias lo permiten, nosotros recibimos con todo gusto a Snowden y le damos asilo aquí en Nicaragua", declaró Ortega.

berlín. El extrabajador de la Agencia de Seguridad Nacional de Estados Unidos (NSA) Edward Snowden declaró que Alemania y otros países colaboran sin hacer preguntas con Washington. "Estados Unidos está en la cama con Alemania, como la mayoría de los estados occidentales", declaró Snowden en una entrevista recogida por al magacín alemán Der Spiegel antes de abandonar Hong Kong y publicada ayer. Snowden explicó que el intercambio de información entre agencias se realizaba de tal forma que los altos cargos políticos podían alegar desconocimiento total de las operaciones en el caso de que algún día salieran a la luz.

"Las otras agencias no nos preguntaban de dónde sacábamos la información y nosotros no preguntábamos. De esta manera, protegían a sus principales políticos del rechazo que se generaría si se descubriera cómo la privacidad de la gente es objeto de abuso masivo en todo el mundo", declaró. Merkel, por su parte, pidió una investigación sobre el llamado programa Tempora, empleado por la NSA y las agencias de inteligencia de Reino Unido para espiar a sus aliados europeos. Tal era la relación entre Estados Unidos y sus aliados europeos, que estos iban mucho más allá de lo que la NSA solicitaba a la hora de recoger datos. El programa no conocía límites. "Chupaba toda la información, sin importar de dónde procedía y qué leyes violaba. Si enviabas un paquete de datos y pasaba por Reino Unido, nosotros lo cogíamos. Si te descargabas algo y el servidor estaba en Reino Unido, era nuestro. Si la NSA recibía orden de centrarse en un individuo, la computadora del objetivo dejaba de pertenecerle: pasaba, más o menos, a ser propiedad del Gobierno estadoundiense", declaró.