Joana Sanz, mujer de Dani Alves, ha solicitado el divorcio al futbolista por medio de sus abogados, según ha adelantado 'El Programa de Ana Rosa'. "Ella ha tomado una drástica decisión que va a cambiar el rumbo de su relación, ya podemos confirmar que Joana Sanz ha pedido el divorcio a Dani Alves", ha relatado la periodista Leticia Requejo en el espacio de Telecinco.

Requejo ha asegurado que la modelo pidió la semana pasada visitar a su todavía esposo en la cárcel, algo a lo que él se había negado, para comunicarle personalmente su decisión. Sin embargo, al negarse Alves decidió que sus abogados le hicieran llegar su petición de divorcio.

Asimismo, la periodista ha apuntado que Sanz se habría arrepentido de sus primeras declaraciones en las que salía en defensa del brasileño, afirmando que lo hizo por petición de la abogada de él.

Recurso de apelación

La defensa del exjugador del Barcelona presentó ayer un recurso de apelación contra la decisión de la jueza instructora de enviarlo a prisión preventiva, acusado de violar a una joven en un baño privado de la discoteca Sutton de Barcelona la noche del pasado 30 de diciembre.

Según fuentes jurídicas, en su escrito, de más de 20 páginas y que se presentó ante el juzgado de forma telemática, el abogado Cristóbal Martell esgrime argumentos para desmontar el riesgo de fuga en que se basó la jueza instructora para enviar al futbolista a prisión, el pasado 20 de enero.

El recurso pide a la Audiencia de Barcelona que revoque la decisión de la titular del Juzgado de Instrucción número 15 de Barcelona y deje en libertad provisional al investigado, si fuera necesario con otras medidas cautelares menos gravosas, mientras se instruye la causa.

La defensa de Alves, que en su primera comparecencia ante el juzgado fue representado por la abogada Miraida Puente Wilson, la ha asumido el bufete Martell Abogados, uno de los despachos más prestigiosos y cotizados de Barcelona que ha llevado, entre otros casos, a Leo Messi en su causa por fraude fiscal y representa a la familia Pujol ante la Audiencia Nacional.

El propio Cristóbal Martell, junto al abogado Arnau Xumetra, visitaron el pasado viernes a Dani Alves en la prisión de Brians 2 de Sant Esteve Sesrovires (Barcelona), donde el futbolista comparte celda con otro recluso en una unidad destinada a albergar en su mayoría a personas vinculadas a delitos contra la libertad sexual.

Alves se mostró dispuesto a llevar una pulsera telemática para garantizar el control de sus movimientos si la justicia acuerda dejarlo en libertad provisional mientras se instruye la causa judicial, según adelantó Antena 3.

Riesgo de fuga

La jueza de instrucción acordó el 20 de enero el ingreso en prisión provisional del futbolista al apreciar que presenta riesgo de fuga y de sustraerse de la acción judicial, teniendo en cuenta su capacidad económica, que reside en el extranjero y que tiene doble nacionalidad, brasileña y española.

En ese sentido, la magistrada razona en el auto que ahora ha sido recurrido que Brasil no tiene convenios de extradición con España, lo que incrementa el riesgo de que el deportista intente huir de la Justicia española y refugiarse en su país de origen.

La instructora ordenó el ingreso en prisión de Alves, investigado por un delito de agresión sexual con penetración, tras tomar declaración el 20 de enero tanto al futbolista como a la joven que lo denunció por violación.

Para enviarlo a la cárcel, la juez tuvo en cuenta varios indicios que incriminan al futbolista -entre ellos los resultados de los análisis biológicos practicados o el visionado de las cámaras de vigilancia de la discoteca-, así como las contradicciones en que incurrió en su declaración frente a la versión persistente y contundente de la víctima.