En una villa marinera plagada de tradición e historia, encontramos playas, parques, calles y acantilados que deslumbran con sus impresionantes vistas y su esplendorosa belleza natural.
La ermita de Santa Catalina.
Jose Mari Martinez
En una villa marinera plagada de tradición e historia, encontramos playas, parques, calles y acantilados que deslumbran con sus impresionantes vistas y su esplendorosa belleza natural.
El mar rompe contra los acantilados.
Europa Press
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El puerto de Mundaka.
Europa Press
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Atardecer en la ermita de Santa Catalina.
Europa Press
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Cielos despejados en Mundaka.
Europa Press
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Personas paseando por sus calles empedradas.
Pankra Nieto.
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El puerto de Mundaka.
Europa Press
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Vistas del mar desde sus zonas de ocio.
Europa Press
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Vistas del mar y de Mundaka.
Europa Press
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Vistas del mar desde Mundaka.
Europa Press
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Unas tablas de surf en una de las calles de Mundaka.
Pankra Nieto
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La playa de Mundaka.
Europa Press
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Personas disfrutando del buen tiempo en Mundaka.
Pablo Viñas
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El puerto de Mundaka.
Europa Press
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El mar rompe contras las rocas.
Redacción DNN
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El puerto de Mundaka.
Europa Press
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Un surfista montando una ola en Mundaka.
Redacción DNN
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