Con la convicción de que el independentismo tiene "la llave" para construir una "mayoría alternativa progresista" en el Estado, la secretaria general adjunta de ERC, Marta Vilalta, ha presionado este lunes a Junts para unir "fuerza" negociadora en Madrid y evitar un "bloqueo" del Congreso.

En rueda de prensa tras las elecciones generales de ayer domingo, Vilalta ha analizado los resultados de ERC, que ha admitido que están lejos de lo "esperado" y "no son buenos", ya no sólo para los republicanos, sino para todo el independentismo.

Pese a mantenerse como la lista independentista más votada, pero empatada en escaños con Junts, la candidatura encabezada por el republicano Gabriel Rufián sumó anoche 462.883 votos y siete diputados en el Congreso, lo que supone un desplome de 400.000 votos y seis diputados menos que hace cuatro años, cuando Esquerra se hizo entonces con la victoria en las elecciones generales en Catalunya.

Estos datos provocan que, si bien ERC sigue teniendo influencia para una eventual investidura de Pedro Sánchez, ahora deberá compartir esa llave independentista con Junts, partido que hasta ahora se ha mostrado contrario a investir al candidato socialista y cuya postura puede acabar siendo decisiva.

"El resultado demuestra que el independentismo catalán tiene la llave del futuro de lo que puede pasar en el marco del Estado. Emplazamos a Junts a construir esa respuesta y utilizar esta fuerza para defender los intereses de Catalunya. Cuanta más unidad y consenso estratégico del independentismo, mejor", ha señalado.

EVITAR LA "TENTACIÓN" DE LA REPETICIÓN ELECTORAL

    Vilalta ha insistido una y otra vez en que "hay posibilidades de construir una mayoría alternativa y de progreso" que "frene la ola reaccionaria" y para la que el independentismo es "decisivo".

Dejando claro que ERC tiene "voluntad de acuerdo", la dirigente ha "tendido la mano" a Junts, instando a ese partido a "no bloquear" ni "dejarse tentar por la repetición electoral". "Hemos frenado el bloque ultra esta vez, pero no podemos correr el riesgo de dar otra oportunidad a PP y Vox", ha advertido.

En cualquier caso, Vilalta también ha avisado a PSOE y Sumar de que la predisposición de los republicanos no supone una carta blanca, sino que el partido de Oriol Junqueras sigue manteniendo sus tres "condiciones" para la investidura: acabar con el déficit fiscal, el traspaso íntegro de Rodalies y mantener la mesa de negociación para avanzar hacia un referéndum y una amnistía.

"Si quieren los votos de ERC para construir esa alternativa, deberán respetar los intereses de la mayoría de catalanes", ha apuntado. "La pregunta es para Sánchez y el PSOE: ¿están en disposición de aceptar las posiciones de ERC o no?".

AUTOCRÍTICA, PERO SIN CAMBIAR LA ESTRATEGIA

    En relación a los porqués del desplome electoral republicano, Vilalta lo ha atribuido sobre todo al impacto del llamado "voto dual", por el que parte del electorado del partido "ha priorizado el voto a opciones progresistas en un marco de obediencia española" en un contexto de polarización y "miedo a la extrema derecha".

Como también ha justificado esos malos resultados en el "desgaste" y el "coste del liderazgo en las instituciones", que ha comportado un "castigo" para el partido.

A pesar de esa "autocrítica", Vilalta sí ha querido dejar claro que ERC sigue considerando que la estrategia de la negociación con el Estado sigue siendo "válida, útil y vigente". "Creemos que la estrategia de ser cada vez más, presionar y condicionar cualquier cuestión para defender la libertad del país es lo más útil que podemos hacer desde la política", ha apostillado.