Algo de alivio para las personas con hipotecas. A expensas de una confirmación de los datos, el euríbor va a experimentar este mes de agosto el mayor descenso interanual en la última década. No se trata de un registro puntual, ya que la tendencia a la baja parece que ha llegado para quedarse y todo apunta a que la desescalada se confirmará a final de año. Este indicador se encamina a cerrar agosto con su quinto descenso mensual consecutivo. Pero no terminan ahí las buenas noticias, ya que las proyecciones realizadas por entidades y expertos del sector cifran en medio punto la reducción a finales de este año, cuando se suelen revisarse las cuotas, hasta situarse en el entorno del 3,2%. La media de lo que va de año es de 3,6.

El euríbor es el índice de referencia más utilizado en el Estado español y en la mayoría de los países europeos para los préstamos hipotecarios. Su cálculo está basado en los tipos de interés a los que los 18 bancos más influyentes de la Eurozona están dispuestos a prestarse dinero entre sí. El euríbor anual es el principal indicador en el cálculo del tipo de interés en varios productos financieros, entre ellos los créditos a la vivienda.

Más allá de las estrategias del Banco Central Europeo (BCE) y de las entidades bancarias, y de los datos macro, lo relevante para las personas con hipoteca es la traducción contante y sonante del ahorro que ese previsible descenso anual del euríbor supondrá para los bolsillos. Es difícil hacer una previsión, pero las proyecciones calculan que podrían abaratarse las cuotas hipotecarias de las familias que tengan que revisar sus créditos para la vivienda en los próximos meses. Los cálculos oscilan desde los 400 euros anuales de media, que estimó hace unas semanas el ministro de Economía, Carlos Cuerpo, hasta los 900 euros de ahorro anual, como apuntan desde algunas entidades financieras para una hipoteca de 150.000 euros a 25 años, teniendo en cuenta el euríbor de este mes y comparándolo con el de agosto del año pasado. Algunos análisis prevén incluso un ahorro bastante superior a los mil euros anuales.

Inflación moderada

¿Por qué se produce este descenso? Por un lado, los tipos de interés están reduciéndose tanto en Europa como próximamente en Estados Unidos de América, tanto para los que tienen hipoteca como para los que tienen un préstamo con su banco. Por otra parte, la inflación desbocada desde hace dos años va cediendo y su ralentización provoca que los bancos centrales establecen unos tipos de interés más moderados y bajos, lo cual alivia a los que tienen una carga fiscal. Además, el mercado laboral está dando buenos datos y mostrando buen músculo, a pesar de que en los últimos meses en Europa está dando señales de ralentización. 

Asimismo, hay que destacar la fortaleza que está demostrando la economía, pese a las incertidumbres que generan conflictos bélicos como los de Rusia contra Ucrania o el genocidio de Israel sobre Gaza, además de la amenaza del regreso de Donald Trump a la presidencia de los Estados Unidos de América. 

Todo ello provoca un “auge del mercado hipotecario y una batalla comercial entre las entidades financieras”, sostienen desde Tecnotramit, la firma de servicios a entidades financieras y compañías inmobiliarias de España y Portugal. Carles Solé, directivo de la compañía, considera que tras un 2023 aletargado en las transacciones inmobiliarias financiadas, en el primer semestre de este año se ha producido un rebote, alcanzando ya cifras a niveles de los años 2021 y 2022 de euríbor negativo. “Esto parece que continuará siendo la tendencia hasta finales de este ejercicio”, sostiene Solé.

En parecidos términos, el profesor titular y doctor de Economía y Ética empresarial en la Deusto Business School, Massimo Cermelli, señaló, en declaraciones a Onda Vasca, que el euríbor “está cayendo más de lo esperado y creo que de aquí a diciembre estará más cerca del 3% que del 3,5%”.

El BCE aprobó a finales del pasado junio la bajada de los tipos de interés de referencia de 0,25 puntos porcentuales y dejó la puerta más o menos abierta a nuevos recortes, todo ello con la intención de corroborar que la zona euro está en un proceso desinflacionario. “No puedo confirmar que la fase de retirada de las subidas de tipos esté en marcha. Hay una gran probabilidad de ello, pero dependerá de los datos. Y lo que es muy incierto es la velocidad a la que viajaremos y el tiempo que tomará“, advirtió su presidenta, Christine Lagarde. De este modo, los tipos de referencia bajaron después de que la autoridad monetaria los aumentase para combatir la alta inflación a un ritmo y escala sin precedentes desde su creación en 1999: 4,5 puntos porcentuales en 10 reuniones sucesivas entre julio de 2022 y el pasado septiembre.

“El euríbor está cayendo más de lo esperado y en diciembre estará más cerca del 3 que del 3,5%”

MASSIMO CERMELLI - Profesor en Deusto Business School

Tipos de interés

Actualmente, los tipos de interés del Banco Central de Europa están en el 4,25%, mientras que la media provisional del euríbor en agosto se sitúa en torno al 3,2%. “Esta brecha significativa sugiere que el euríbor ya está anticipando una futura reducción de los tipos de interés y, por tanto, podríamos experimentar una situación similar a la de diciembre de 2023”, señala Paula Eseiza, experta en hipotecas del comparador financiero Helpmucash, en referencia al descenso repentino del 4,022% al 3,679% antes de estabilizarse hasta el final del primer semestre de este año. “Es probable que se repita este patrón y que el euríbor se estabilice o caíga ligeramente en la última parte de este año”, subraya la experta.

“Espero que se sitúe entre el 3% y el 3,2% si el BCE recorte los tipos y la inflación se mantiene”

Paula eseiza - Experta en hipotecas

La caída del euríbor se debe a que el mercado ya está descontando la próxima bajada de los tipos de interés que aplicará el BCE, que se espera que se reduzcan 25 puntos básicos (del 4,5% al 4,25%) tras la moderación de la inflación en los últimos meses. A comienzos del verano, Lagarde no descartó un recorte de tipos en la reunión de septiembre, aunque subrayó que la cuestión está “muy abierta”. Si se confirmara, con estas proyecciones, es previsible que a finales de año volverán a superarse las 400.000 hipotecas anuales sobre vivienda en el Estado español, superando ampliamente la cifra del año pasado, lo que previsiblemente animará el mercado.