Abril también fue un mal mes para los gastos básicos de las familias vascas. El IPC subió dos décimas el mes pasado hasta un 3,5% interanual en la CAV, lo que supone un incremento de ocho décimas respecto a marzo. Es un repunte menor en comparación con los incrementos registrados durante 2022, que impulsaron el índice hasta el 10,5% en julio y forzaron al Gobierno central a intervenir los precios de la electricidad con un recorte en el IVA.
Sin embargo, la base de la subida de este pasado mes de abril afecta a todos los bolsillos. Por un lado, el grupo de la alimentación y las bebidas no alcohólicas repunta un 5,4%. Este incremento se debió, en su mayor parte, a la subida de los precios de frutas y legumbres y hortalizas, frente a la bajada en el mismo mes de 2023, ha informado el Instituto Nacional de Estadística (INE). El aceite por su parte continúa siendo uno de los productos que más se encarece. En cuanto a la energía, el gas vuelve a presionar las economías domésticas y la luz bajó menos que el año pasado.
Energía y alimentación al alza
Los precios de la electricidad y el gas han subido un 9,3% en lo que va de año. Mientras la alimentación, excluidas las bebidas no alcohólicas, que empezó el año con una subida del 0,8% ya se ha situado en el 1,7%, anticipando una dinámica alcista los próximos meses. Otro reto para las economías familiares, sobre todo en aquellas en las que los sueldos no se han ajustado a la inflación.
A las puertas del habitual calentamiento de los precios a las puertas del verano, el IPC envía una primera señal de alarma. A la espera de lo que ocurra este mes -las gasolinas se han situado en mínimos del año-, hay a corto plazo otro foco de atención: la posibilidad de que el Banco Central Europeo baje los tipos de interés en junio y alivie la carga de las hipotecas.
Por territorios
En el análisis territorial, destacan las subidas de Bizkaia (3,6%) y Gipuzkoa (3,5%), frente al 2,8% de Araba. En el territorio vizcaino sube sobre todo la alimentación (6,2%). En Gipuzkoa el mayor repunte es de los hoteles y restaurantes (5,3%), pero el grupo con mayor impacto en la cesta de la compra es alimentación (4,6%).
Es el mismo porcentaje de subida en Araba, que sin embargo muestra una evolución más moderada en vestido y calzado (0,2%). En este apartado, destaca Gipuzkoa con un descenso del 1%. En cambio, el dato escala en Bizkaia hasta el 4,1%.
La sintonía es total en vivienda, agua, electricidad, gas y otros combustibles, con crecimientos de entorno al 4% en los tres territorios. Ahí entran en juego gran parte de los gastos fijos del hogar, precisamente los que las familias no pueden controlar.
Por encima de la media del Estado
Los datos hechos públicos esta mañana por el INE, sitúan a Euskadi dos décimas por encima de la media del Estado en abril, que se sitúa en el 3.3%. En marzo estaba una décima por debajo. De hecho, la CAV es la cuarta comunidad más inflacionista en estos momentos, solo superada por Galicia, Islas Baleares y Castilla-La Mancha. La comunidad con los precios más bajos en Nafarroa (2,9%).