Vitoria. Las plantas de Tubacex en Llodio y Amurrio, en las que trabajan unas 600 personas, retomarán este miércoles su actividad de "forma escalonada" y con unos "niveles mínimos" después de que el Gobierno haya actualizado el listado de actividades económicas que pueden desarrollarse durante esta fase del estado de alarma.

El pasado 17 de marzo Tubacex anunció la paralización progresiva de su actividad industrial después del plante de los trabajadores, aunque la retomó una semana más tarde, el día 23, con la adopción de medidas específicas para evitar los contagios por COVID-19 entre sus trabajadores.

Sin embargo, después de que el Gobierno central aprobara este domingo un real decreto que prohibía todas las actividades económicas no esenciales, el fabricante alavés de tubo de acero inoxidable se vio obligado a cerrar sus instalaciones

Las posteriores notas "interpretativa" y aclaratoria" del Ministerio de Industria y del Departamento de Desarrollo Económico del Gobierno Vasco, respectivamente, han llevado a Tubacex a retomar la producción a partir de este miércoles, según ha informado la compañía.

Argumenta en este sentido que "prácticamente la totalidad de la facturación de las plantas en Álava está destinada al mercado de exportación", que era una de las circunstancias contempladas por el Gobierno para permitir actividad industrial, aunque siempre en unos niveles mínimos.

Recuerda también que las plantas de Llodio y Amurrio están destinadas a la fabricación y suministro de "componentes esenciales" para los sectores de energía y tratamiento de agua, aire y gases, entre otros, y que la empresa "forma parte de la Industria electro intensiva, que resulta necesaria para garantizar el suministro y la estabilidad del sistema eléctrico".

Por todo ello, Tubacex retomará su actividad "de forma escalonada y manteniendo unos niveles mínimos que garanticen el cumplimiento de los contratos internacionales", de manera que pueda cumplir "las entregas comprometidas en el corto y medio plazo".

La empresa alavesa ha lamentado que en las últimas semana se han cancelado varios pedidos debido a "la situación de incertidumbre y las paradas en las plantas" y que "en este contexto el mantenimiento de la actividad se hace absolutamente necesario para garantizar la sostenibilidad del negocio".

La vuelta a la actividad en Llodio y Amurrio será "controlada y con un estrecho monitoreo por parte de la dirección y los equipos de prevención, que mantienen activo un estricto protocolo para garantizar todas las medidas preventivas necesarias" para evitar contagios por coronavirus.