Un técnico vitoriano de balonmano se encuentra de enhorabuena en las últimas horas. Y es que Pablo Larrumbide, que ejerce como ayudante de Antonio Rama en el Fraikin Granollers, se coló el pasado martes contra todo pronóstico en la Final Four de la Liga Europea, la segunda competición más importante a nivel de clubes dentro del Viejo Continente tras la Liga de Campeones y en la que militan equipos de un indudable potencial, tanto deportivo como económico.
Precisamente uno de ellos, el poderoso Flensburg alemán, se vio sorprendido por el Granollers, el vigente subcampeón de la Liga Asobal en la eliminatoria de cuartos de final previa a la Final a Cuatro. El cuadro alemán se las prometía muy felices tras ganar en la ida por 30-31 en tierras catalanas, pero delante de su público hincó la rodilla por ocho goles de diferencia (27-35).
Larrumbide, como no podía ser de otra forma, tiene su cuota de responsabilidad en este sonado éxito del Granollers, cuya plantilla está plagada de jóvenes sobrados de talento procedentes la inagotable cantera vallesana que se complementan a la perfección con otros jugadores más consolidados como Antonio García y Yusuf Faruk.
Antonio Rama y el vitoriano plantearon una defensa 5:1 muy profunda que consiguió su propósito de alejar a la potente primera línea alemana.
El Fraikin Granollers disputará su segunda Final Four de la Liga Europea los días 27 y 28 de mayo. Precisamente lo hará en el Flens-Arena de Alemania, el mismo recinto donde este martes consiguió uno de los triunfos más importantes de su historia. La anterior vez que se clasificó para este evento fue en 2016 acabando tercero.
Los otros conjuntos que han obtenido su pasaporte son los alemanes del Füchse de Berlín -en el que militó en su día el gasteiztarra Iker Romero entre 2011 y 2015 antes de su retirada- y Göppingen, además de los franceses del Montpellier.
Todavía no se han sorteados los cruces de semifinales que alumbrarán la gran final, pero de momento el Granollers -siempre a la sombra del Barcelona en la Liga Asobal- ya ha hecho historia. Para darle más valor al éxito, tan solo cabe señalar que el presupuesto del Flensburg multiplica en más de 10 al del humilde conjunto catalán.