- Seguro que el vodka corrió ayer por las entrañas del Madrid Arena ya que Rusia se proclamó campeón de la Copa Davis por tercera vez en su historia. En todas ha estado Shamil Tarpischev, el hierático capitán de 73 años, jefe del tenis ruso que ha visto florecer a otra brillante generación de tenistas que suceden quince años después a aquellos Nikolai Davydenko y Marat Safin. Rusia era el gran favorito cuando empezó la fase final hace semana y media y cumplió el pronóstico con la autoridad que le otorgaba el ranking de sus jugadores, todos entre los 30 primeros del mundo.

En la final, Andrey Rublev, número 5, abrió el camino con una victoria ante Borna Gojo por 6-4 y 7-6. El croata perdió su primer partido en la Copa Davis este año porque su rival jugó con la contundencia y temple que le ha faltado otros días. Con el camino expedito, Daniil Medvedev, número 2, completó el trabajo ante Marin Cilic por 7-6 y 6-2, marcando la distancia que existe ahora mismo entre el último ganador del US Open y el que lo ganó en 2014, que apenas ha podido dar puntos a su equipo. El partido de dobles no fue necesario y la celebración de Rusia no se hizo esperar y bien lo merecía porque el país ha ganado este año la ATP Cup, la Billie Jean King Cup y la Copa Davis. Solo Estados Unidos, Australia y la República Checa, el último en 2012, habían hecho el doblete masculino-femenino antes.

Y acabado el segundo año con el nuevo formato, que sigue teniendo detractores y partidarios, la ITF y Kosmos, dueños del torneo, le van a dar otro retoque para aunar lo antiguo y lo moderno. Así, España se medirá como local a Rumanía en la eliminatoria de acceso a la fase final de la Copa Davis de 2022. Será en marzo y en la semana anterior a Indian Wells, por lo que habrá que ver si se juega en tierra batida, como suele ser costumbre, o se hace en superficie dura, como corresponde a esa fase del calendario. En cualquier caso, España es muy favorita en un cruce desequilibrado ya que Rumanía no tiene jugadores entre los 200 primeros del ranking.

España esperaba una invitación directa para la fase final, pero ya no se va a jugar en Madrid y el negocio aconsejaba otras opciones. Así, los organizadores se han decantado por Serbia, por el compromiso con el torneo que Novak Djokovic ha mostrado y sigue mostrando, y a Gran Bretaña, un clásico al que no conviene molestar más de lo necesario. Rusia y Croacia, finalistas este año, también tiene el pase directo.

Las cuatro selecciones ya clasificadas y las doce que salgan de las eliminatorias previas disputarán a finales de noviembre de 2022 cuatro torneos en cuatro sedes distintas de donde saldrán las ocho que afrontarán los cuartos de final, la semifinal y la final en una ciudad neutral a finales de noviembre. Todo apunta a que será Abu Dhabi con un compromiso multianual, pero ni la ITF ni Kosmos han soltado prenda, por si acaso. Los rumores sobre la ciudad emiratí no han recibido unanimidad porque el cambio de continente y de horario no ayuda en unas fechas tan tardías.