El Leipzig abrió la puerta y el PSG entró hasta la cocina. Tras haber eliminado con brillantez al Atlético de Madrid, los alemanes pecaron de inocencia, quizá amilanados ante la posibilidad de llegar a una final de la máxima competición europea a sus escasos 10 años de edad. Y ante esta puesta en escena, la impresionante delantera francesa no dudó en hacer sangre liderada por Mbappé, pero sobre todo por un Di María iluminado y un Neymar que recordó a su mejor versión. Marquinhos abrió la lata en el 13 a pase del fideo, que marcó el 0-2 en el 43 tras terribles errores de los alemanes. Y remataba la faena Bernat de nuevo a pase de Di Maria en el 53 mientras Neymar rompía cinturas.