dallas. El gran sueño del ala-pívot alemán Dirk Nowitzki de conseguir un anillo de campeón de la NBA está más cerca que nunca después que los Mavericks de Dallas ganasen la pasada madrugada por 112-103 a los Heat de Miami en el quinto partido de las finales que ahora dominan por 3-2 al mejor de siete. Aunque el sexto partido se jugará este domingo en el American Airlines Arena, de Miami, los Mavericks, por primera vez en la serie, se pusieron con la ventaja y sólo necesitan un triunfo más para lograr su primer título de campeones de la NBA.
La gran figura del partido volvió a ser el propio Nowitzki, ya más recuperado de los efectos de la gripe que sufrió el pasado martes, para conseguir 29 puntos, incluida la canasta de mate que le dio la ventaja buena a los Mavericks con 2:45 minutos por jugarse (102-100). El escolta Jason Terry y el veterano base Jason Kidd, con sendos triples y dos puntos más cada uno desde la línea de personal, iban a sentenciar el marcador a favor de los Mavericks, que cinco años después de haber perdido las finales de 2006 ante los Heat están a las puertas de devolverles la venganza deportiva.
Dallas, que aquel año tenía la ventaja de campo e iba 2-0 en la serie, además de ganar por 13 puntos en el tercer periodo del tercer partido, perdió aquel título por un global de 4-2. Ahora cuenta con una ventaja a su favor, está a un triunfo de su primer título, y lo que es más importante, no ha permitido que esta vez los Heat utilicen su campo para celebrar un segundo anillo de campeones. De hacerlo, será en Miami y después que se haya tenido que disputar un séptimo partido.
Lebron James, la rutilante estrella de los Heat,que en el cuarto partido estableció su anotación más baja como profesional al conseguir sólo ocho puntos, hizo esta vez mejor las cosas y fue el jugador más completo de su equipo al lograr un triple doble de 17 puntos, 10 rebotes y 10 asistencias, que sin embargo no iban a ser suficientes para evitar la dolorosa derrota.