Este viernes tan especial en el Buesa Arena, que está acogiendo la primera de las dos jornadas en las que La Polla Records se va a despedir en casa, acaba de arrancar con el primero de los cinco conciertos previstos, el que ha ofrecido el trío gasteiztarra Cerveza Suicida, que justo esta semana ha lanzado el EP que el pasado verano se grabó en Bonberenea.
Poco antes de la seis de la tarde y con algún problema técnico, la banda se ha adueñado del festival para desgranar varios de esos temas en un concierto que, como suele ser habitual en estos casos, ha sido corto de duración, aunque ha dado para mucho. A estas horas, todavía el lugar no cuenta con demasiado público, pero los presentes, aún conscientes de todo lo que queda por delante, han estado a la altura de la actitud y la aptitud del grupo.
Ellos suelen decir que les falta talento, pero de eso nada. Otra cosa es que esta pandemia haya puesto unas cuantas piedras en el camino justo después de ganar a finales de 2019 Gazte Talent. En el Buesa, sin importarles nada, han repartido sonidos, locura, risas y mala leche casi a partes iguales.