Vitoria - La trigésimo sexta edición de la Semana de Cine Vasco se despide hoy del público tras unas jornadas intensas en las que el certamen ha agotado, un día tras otro, todas las entradas disponibles. De hecho, todo hace indicar que esta tarde, a partir de las 19.30 horas en Vital Fundazioa Kulturunea (Dendaraba), se repetirá el mismo argumento puesto que son varios los alicientes con los que cuenta la clausura.
Uno de los más destacados será la entrega del galardón Uno de los Nuestros, un premio especial con el que el certamen organizado por la Fundación Vital reconoce cada año la trayectoria profesional y la aportación de una persona del sector audiovisual alavesa, una puesta en valor que en esta ocasión va a recaer en el director vitoriano Paul Urkijo, que a lo largo de los años ha sido un asiduo a la Semana tanto con sus cortos como con su primer largometraje, Errementari.
El realizador se mostró ayer más que contento con el premio, que aseguró que le había pillado un tanto de sorpresa. De momento, él sigue dando pasos para hacer realidad su próxima película, Irati. Con todo, cabe recordar que Urkijo comenzó este 2020 rodando un nuevo corto, Dar Dar, un trabajo protagonizado por la actriz, escritora y ex gimnasta vitoriana Almudena Cid. El resultado final "será un cuento de terror para mayores" cuya grabación se llevó a cabo en Olaeta.
No será, de todas formas, su reconocimiento la única distinción que se entregue esta tarde puesto que la Semana, gracias a las votaciones del público, también entregará sus habituales premios a los mejores corto y largo seleccionados entre la programación de este año, un cartel en el que han tomado parte títulos como La pequeña Suiza, de Kepa Sojo -que también está preparando su tercera película, o Un coche cualquiera, de David P. Sañudo -inmerso en la postproducción de su primer largometraje-. Además, el público podrá ver Garbage, de José Muniain, antes de otro de los grandes alicientes de la despedida, el estreno de Begirada.
Se trata de la primera película colectiva sobre Vitoria compuesta por diez piezas creadas por cineastas de Álava. La ciudad se convierte en un gran set de rodaje y cada autor se inspira en sus calles, sus bares, sus tradiciones y sus habitantes para contar su historia. Ha contado con la producción de la Asociación Iris Audiovisual, la Federación de Asociaciones Gauekoak y la Fundación Vital.
