donostia - El Museo Oteiza acoge el proyecto expositivo âMacla, mamua, bismuto, vicarioâuna intervención en torno a la obra del escultor vasco realizada expresamente por los artistas Karlos Martinez B. y Javier Arbizu para el centro de Alzuza y que constituye la primera intervencion perteneciente al programa Hazitegia (semillero).
Se trata de un programa promovido por el Museo Oteiza y el Centro de Arte Contemporáneo de Huarte y surgido de la voluntad de conjugar los ámbitos de producción y exhibición de los dos centros que lo promueven, para generar nuevos escenarios de reflexión en torno a la obra de Jorge Oteiza.
El proyecto, informa el Museo Oteiza en un comunicado, se inició con la residencia de investigación y producción que ambos artistas realizaron el pasado año en el Centro Huarte.
Esta residencia permitió a los autores definir un proyecto que se materializó en una primera intervención realizada en la célebre Casa Huarte de Madrid, edificada en 1966 por los arquitectos Corrales y Molezun, y que se desarrolló durante una única jornada el pasado 17 de febrero, producida por Caniche Editorial.
âMacla, mamua, bismuto, vicario” continúa ahora en la exposición que acoge el Museo Oteiza, entre el 27 de julio y el 30 de noviembre de 2018, y que ha contado con la colaboración de Fundación âla Caixaâ y la Fundación Caja Navarra, dentro del programa Innova Cultural, y del Ayuntamiento de Egüés .
encuentro de volúmenes El punto de partida de este proyecto es la idea de âmaclaâ, asociada a la serie de obras así denominadas por Oteiza, originadas por la fusión o encuentro de dos o más volúmenes y activadas por la relación de sus partes.
A partir de ese momento, señala el centro cultural, esta intervención “propone una particular manera de asociar lo escultórico con lo objetual, mediante sutiles intervenciones que trastocan las características propias de materiales y objetos, que generan un nuevo repertorio de significados que lo vinculan de manera libre con el espacio del Museo, los modos constructivos de la obra de Oteiza y la consideración de lo escultórico como un proceso en permanente transformación”. - Efe