barcelona - El festival internacional Sónar de Barcelona cerró anoche su 21ª edición con cerca de 110.000 espectadores procedentes de un centenar de países, cifra que, aunque inferior a la del año 2013, cuando tuvo 121.000 asistentes, supone un récord en los visitantes de los conciertos diurnos, con 52.000 personas.
A falta de que pasasen por el escenario un tercio de los artistas y bandas del programa del festival, la organización hizo ayer un primer balance que, según explicó Enric Palau, uno de sus tres codirectores, confirma el éxito del certamen en su exploración de nuevos formatos y contenidos, con montajes como los ofrecidos por Plastikman o Massive Attack, actuaciones que van más allá de lo estrictamente musical.
el segundo mejor registro Estos 110.000 espectadores suponen el segundo mejor registro de la historia del festival, y refleja un incremento de la actividad diurna (que pasa de 41.000 a 52.000 espectadores), con una importante representación de público extranjero, que ronda el 53 % de los asistentes.
"La cifra de 121.000 espectadores del año 2013 fue excepcional, una confluencia histórica extraordinaria relacionada con la celebración del 20º aniversario", indicó Ricard Robles, otro de los codirectores. Los organizadores adelantaron que el festival Sónar aumenta su ámbito de acción y que en 2015 celebrará nuevas ediciones en Santiago de Chile y Bogotá. - Efe