vitoria. De la cruz de su santa a la cruz de la SGAE. Kanpezu ha dado marcha atrás a su melodía, ha pinchado el disco al revés, y ha optado finalmente por pagar el dinero que la Sociedad General de Autores y Editores (SGAE) le exige por utilizar música de firma, música con derechos de autor, en sus festejos durante el último lustro. La localidad de la cuadrilla de Montaña Alavesa se allana -no es una metáfora, es una figura jurídica que reconoce la pretensión del adversario- y omite así el paso por los tribunales, un proceso que, con toda probabilidad, le iba a conllevar gastos adicionales sin visos de victoria.

"Nos reunimos con la gente de los servicios jurídicos de la Diputación Foral de Álava y nos recomendaron que era mejor allanarse, que todos los casos similares al nuestro que habían ido a juicio habían perdido", recuerda Oscar Visa, concejal de Ezker Batua-Berdeak en el Ayuntamiento de Santa Cruz de Campezo. "Estaba perdido de antemano y encima tendríamos que afrontar las costas del juicio".

De este modo, el equipo de gobierno de la localidad alavesa se pliega a las exigencias de la SGAE, que el pasado 25 de noviembre, como ya adelantó DIARIO DE NOTICIAS DE ÁLAVA, remitía una citación para anunciar sus pretensiones: 8.094,37 (más los costes procesales) en concepto de las actividades culturales organizadas durante los últimos cinco años. Es decir, dinero a cambio de la música de txarangas que se disfrutó en los bailables y pasacalles, y de algún que otro play back en el que los lugareños -y visitantes- probaron su garganta y sus condiciones. Desde la entidad privada que asegura defender los derechos de autor se pretendía extender la exigencia económica a posteriori hasta el año 1998, pero el delito había prescrito más allá del siglo XXI.

"Abierta al diálogo", la SGAE aseguró a este diario que, desde 2004, se ha dirigido a la entidad local alavesa a través de la visita de sus representantes, del envío de cartas y de varias reclamaciones administrativas previas. Finalmente, la demanda fue el camino escogido para hacer frente a lo que denominaron como "caso excepcional" de Kanpezu, ya que, según explicaron, el 95% de los municipios vascos cumplen con los cánones marcados desde esta entidad en virtud del acuerdo que la SGAE tiene firmado con EUDEL.

A dicho convenio se adhiere desde ahora Kanpezu, evitando la posibilidad de futuras misivas. Así, "una vez que nos tengan en esa lista", el uso de partituras y melodías no podrá tener una interpretación fraudulenta. "No merece la pena esperar cinco años más para que vuelva a suceder lo mismo", apunta Óscar Visa.

Así que Kanpezu no pasará por el banquillo -la cita estaba prevista para este mismo mes- y pagará lo que la SGAE solicita, confiando en que no haya extras de última hora. Y después volverá a su vida normal. Una vida que, sin embargo, se verá lastrada en los próximos tiempos debido a este imprevisto económico, condicionando los presupuestos de las próximas celebraciones en la localidad alavesa.

"Preparémonos, porque tarde o temprano vendrán exigiendo también el derecho de pernada, y lo que sera más lamentable es que seguramente el gobierno de turno se lo dará, alegando algún tipo de estupidez. Espero que se lo gasten en langosta y se les atragante, aunque lo mas seguro es que se lo gasten en llenar alguna piscina de Miami o en construirse alguna casita de esas que tienen los muy mal pagados y maltratados músicos, léase Rosario, Ramoncín y todos esos que se manifiestan diciendo que la piratería les va a matar de hambre", se puede leer en Internet. ¿Quizás la cita exija también derechos de autor?